Crónica del clásico: Este León dejó de asustar hace rato

Alajuelense se encargó de establecer este domingo un nuevo récord, pero negativo. Cayó 2-0 en su visita a Tibás y sumó así su quinta derrota consecutiva.

Ya se sabía que este León anda renco, con los dientes sin filo y las uñas recortadas. Hace ya mucho rato que dejó de asustar, pero eso quedó comprobado con la estadística del periodista Christian Sandoval, quien dio cuenta de que la última vez que la Liga perdió cinco juegos consecutivos fue en 1942. ¡Hace 75 años!

Lo de los manudos es penoso para un club llamado a ser emblema, pero que actualmente parece más bien un equipo de los que pelea por no descender.

Lo peor es que la recuperación no se ve cercana. La resurrección del León podría llevar meses, o años en el peor de los casos.

Antes de la quinta derrota, el discurso de los rojinegros era que los clásicos son mejengas aparte y que no importa cómo vengan los equipos, que en un clásico todo puede cambiar.

Lo que pasa es que las malas decisiones tomadas por la directiva del ahora expresidente Raúl Pinto fueron tan malas que no hay manera de levantar al muerto. Tampoco se puede dejar sin responsabilidad al grupo comandado ahora por Fernando Ocampo, quien sigue sentado en la galleta y diciendo que aún pueden clasificar si ganan el miércoles en Pérez Zeledón. Esas cosas también asustan.

Pato socó tuercas

Wílmer López, exvolante, emblema manudo y quien ahora se come el chicharrón de ser el técnico de ese equipo tan deficiente, dejó fuera de la convocatoria a jugadores veteranos como Luis Miguel Valle, Kenner Gutiérrez y Christopher Meneses. Puso como titulares a Álvaro Aguilar, Luis Sequeira y Barlon Sequeira intentando darle otra cara al equipo.

Sin embargo, con remiendos no se arreglan los errores grandes. La Liga tuvo opciones, pero nada más. Una fue un tiro de libre de José Luis Cordero (que pasó cerca del marco y más de un liguista festejó como gol); otra cuando hubo una mano de Joseph Mora en el área luego de un jugadón de José Salvatierra que el debutante en clásicos Keylor Herrera no pitó como penal. Y tampoco pitó el penal dado ahí mismo cuando Justin Salinas agarró en el área a Jonathan Mcdonald. Esas fueran opciones. Goles manudos no hubo.

Saprissa jugaba por ratos, porque tampoco es que los morados sean un equipazo. Marvin Angulo pegó un remate en el horizontal y luego tuvieron la ayuda de un autogol del manudo Kurt Frederick para abrir el marcador.

Kurt quiso despejar un centro por la banda izquierda de Daniel Colindres, con tan mala suerte que empujó el balón en su propio marco. Era el minuto 34 y llegaba el 1 a 0.

Esa jugada afectó el ánimo de los jugadores manudos. Andan en días tan malos que cualquier cosa les afecta. Después de ahí solo hubo una corrida de Din John Arias, al 37' , cuando el jugador abrió la bola para que Mcdonald se hiciera grande, pero el delantero remató horrible y desviado.

Cinco minutos después fue Luis Sequeira el que le puso un pase en el área a Din John, quien quiso darle de media vuelta a la bola y salió por fuera.

A la Liga se el acabó la poquita pólvora que tenía al 43'. Se dio cuando Mariano Torres remató al marco y, con la complicidad de Patrick Pemberton, que le regaló el palo derecho del marco, el che hizo el segundo.

En el segundo tiempo Alajuelense hizo lo que pudo. Y eso fue nada más que aguantar, los morados no se desgastaron aunque siguieron pulseando el tercero.

Por Alajuelense entró Pablo Gabas para demostrar que, aunque los liguistas le agradecen todas las alegrías que les dio, ya es hora de que le deje su lugar a otro jugador.

El partido se volvió malo. El 2-0 fue definitivo y quedó claro que a la Liga no la salva nadie.

Lo más grave, junto a lo que se ve en la cancha, es que la directiva rojinegra insiste en que tienen chance de clasificarse y por eso no separarán aún a jugadores pese al montón de fantasmas que le salieron al León este domingo en Tibás.