Sin complicaciones, haciéndola fácil y dando un paso importante en casa, el Real Madrid una vez más demostró que en la Champions League está en su salsa y derrotó sin apelaciones 2-0 al Chelsea en el partido de ida de los cuartos de final del torneo continental.

Los goles de Karim Benzema a los 21 y de Marco Asensio al 74 le encaminaron una serie que parece casi resuelta, no solo por el resultado obtenido, sino por el presente de ambos equipos.

El Madrid, finalista en la Copa del Rey al eliminar en el Barcelona y segundo en Liga, luce mejor que un Chelsea en el puesto once la Premier League con 39 unidades y muy lejos de los puestos para clasificar a copas europeas, con una temporada que ha sido un fracaso a nivel local.

Con un viejo zorro como Carlo Ancelotti en el banquillo, ganador de cuatro Orejonas ante un Frank Lampard que volvió al banquillo blue hasta final de temporada, el duelo estaba disparejo empezando por esa zona.

Al final la buena actuación de Kepa Arrizabalaga, portero español del Chelsea, evitó una mayor derrota en la serie que tendrá el duelo de vuelta la próxima semana en Londres. De feria los visitantes sufrieron la expulsión de Ben Chilwell al 59.

Un año después, día por día, del partido que dio el pase al Real Madrid a semifinales de la Champions frente al Chelsea la pasada temporada, el equipo blanco dominó al conjunto inglés, cuyo objetivo desde el principio fue intentar salir vivo del Bernabéu.

Con una defensa de cinco hombres y el contraataque como principal arma, el equipo de Frank Lampard fue el primero en dar un susto a la afición local en una gran carrera de Joao Félix, cuyo tiro atajó Thibaut Courtois a los 2 minutos.

Fue prácticamente la única ocasión en la que se vio al luso, cedido por el Atlético de Madrid, que poco a poco fue desapareciendo del partido hasta ser sustituido por Trevoh Chaolobah (65), en medio de los pitos del Bernabéu.

Tras el descanso, el Real Madrid afianzó su dominio apoyado en su superioridad numérica tras la expulsión de Chilwell al derribar a Rodrygo cuando llegaba al área rival (59).

El Chelsea, con uno menos, se encerró atrás y dejó solo adelante a Kai Havertz, que había entrado por Sterling (65), para tratar de aprovechar algún contraataque.

El Real Madrid pudo aumentar su cuenta en un precioso disparo de Modric con rosca que se fue rozando la escuadra de Kepa (51), pero tuvo que esperar hasta el minuto 74 para que llegara el segundo.

Asensio, que había entrado por Rodrygo (71), recibió en la frontal del área un pase de Vinicius para soltar un disparo que se coló en la portería ajustado al palo.

El segundo gol fue el mazazo definitivo para el Chelsea, que se pasó los últimos minutos más preocupado de evitar un tercer gol blanco que de intentar recortar la distancia en el marcador.

El ganador de esta serie se medirá al ganador de la serie entre Manchester City y Bayern Munich, el cuadro inglés ganó 3-0 el duelo de ida.

Milan adelante

En el otro duelo de la fecha, el Milan batió 1-0 en su estadio al Nápoles gracias a un gol del argelino Ismaël Bennacer, que coronó una gran jugada del español Brahim Díaz.

Ineficaz y sin su mejor goleador, el lesionado Victor Osimhen, el Nápoles tendrá que remontar el próximo martes en su estadio Diego Maradona si quiere jugar por primera vez las semifinales de la Champions.

Los italianos se enfrentarán al vencedor del duelo entre el Inter de Milán y el Benfica, los neroazurris triunfaron 2-0 como visitantes.