El técnico de Limón, Horacio Esquivel, aseguró que estudió muy bien a Saprissa y que perdió el partido sólo porque la delantera morada fue más contundente.
El entrenador de la Tromba del Caribe salió goleado de Tibás, pero picó a los saprissistas cuando en la conferencia de prensa aseguró que la defensa del Sapri es frágil.
"Teníamos bien claro que la línea defensiva del rival es frágil y lo sostengo con todo respeto, quiero que me entiendan y no malinterpreten, me parece que de acuerdo a lo que vimos tuvimos el control del rival, desgraciadamente los lanzamientos largos, que me cansé de trabajar con los muchachos, no los controlaron ", dijo Esquivel.
"Fueron despistes nuestros defensivos, si hablamos de elaboración de juego, Saprissa no nos pasó por encima, pero los partidos se ganan con goles y cuando ellos tuvieron chance anotaron. Nosotros tuvimos una oportunidad para poner el partido a favor nuestro en la contra con el penal, pero desdichadamente Andrey (Francis) cambió la forma de tirar los penales y ya saben el resultado", agregó el timonel.
Horacio considera que fallar ese penal se paseó en ellos porque pudo haberle cambiado el rumbo al juego y hasta haber empatado.
Además, Esquivel tuvo que hacer movimientos de jugadores para evitar quedarse con 10 hombres.
Por ejemplo, pasó a Steven Williams de contención para que no se calentara más de la cuenta y se ganara la expulsión en la delantera.
"Lo que yo intenté con Williams fue bajarle la intensidad y que trabajara más con su masa gris que con el hígado, porque es un muchacho muy temperamental y tengo que encontrar la manera de manejarlo, había que cuidarlo porque tenía amarilla, quería evitar una reacción y además meter más velocidad con Víctor Pérez", explicó Esquivel.
Con la derrota, Horacio sabe que debe ponerle más en el cierre para clasificar e intentará buscar los puntos faltantes en el Juan Gobán.
También anunció que seguirá arriesgando en todo terreno de juego pues le gusta dar espectáculo.
"Hay que arriesgar, al final si hubiese jugado más defensivamente capaz y hubiera perdido igual, y a mi me gusta el espectáculo, aunque alguna gente se olvida de ver el partido y solo viene a gritar improperios, pero creo que el fútbol es para deleitarse y eso intento yo, para eso paga la gente, para ver un espectáculo", aseguró Esquivel.