Pablo Gabas ya no será aquel jugador que se echaba la Liga al hombro; sin embargo, tiene toda la experiencia y el derecho de llamarles la atención a sus compañeros cuando se salen de sus casillas, tal y como le pasó este domingo al defensa Kenner Gutiérrez en el estadio Juan Gobán.
Gutiérrez jaló expulsado al minuto 90 por acumulación de amarillas. De hecho, la segunda tarjeta se la ganó por reclamarle al árbitro Keylor Herrera.
El defensa se puso como los diablos, tiró la cinta de capitán (después la recogió Gabas) y empezó a decirle de todo a Herrera. Entonces Gabas llegó y le puso la mano izquierda en la boca para que se calmara y, de paso, no reciba una fuerte sanción por lo que Herrera vaya a reportar en el informe. La llamativa imagen la captó nuestro fotógrafo José Cordero.
No es la primera vez que Gabas trata de calmar las aguas. El miércoles pasado, intentó calmar a Jonathan Mcdonald, al que se le metió el "Chucky" (otra vez) después de recibir un planchetazo del universitario Andrés Castro, en la victoria manuda de 2-1.
Sin duda Gabas conoce a sus compañeros y por eso mete mano para evitar expulsiones tontas e innecesarias.
El tico-argentino ingresó de cambio este domingo, al 69', por Luis Sequeira, en una mejenga que terminó 1 a 1 y les permite a los manudos seguir terceros en la tabla, con 18 puntos.