Descalzas la prueba de fe es mayor

Decenas de fieles católicos comenzaron este sábado su recorrido con rumbo a la casa de la Negrita en Cartago para demostrarle su fe y agradecimiento por los favores concedidos.

La familia Delgado Hernández formó parte de ese grupo de fieles. Ellos viajaron desde Pérez Zeledón para saludar a la patrona de Costa Rica.

Aunque de San Isidro de El General a Cartago viajaron en el bus de las 5 de la mañana y la caminata fue corta, hubo un detalle que demostró su devoción y sacrificio. Tanto la madre Kathya Hernández como sus hijas Noily y Marlen realizaron el recorrido desde La Lima de Cartago a Los Ángeles descalzas.

"Caminar descalzo es como una prueba de fe, porque los pies son sensibles y lo único que a usted lo hace aguantar es esa devoción. A mí por ejemplo, no se me hizo ninguna ampolla y caminamos desde las 7:30 de la mañana hasta casi las once de la mañana que llegamos", explicó Noily, la mayor de las hijas.

A ellas las acompañó su padre, don Juan Delgado y tienen esta tradición desde hace cinco años.

"Preferimos venir antes porque con tanta gente ya no se disfruta a la Negrita, ni la fuente. Venimos a agradecerle por lo que nos da día con día y pedirle que siempre nos tenga con salud", contó Noily.

También le pidieron a la virgencita para que pronto las autoridades del cantón o las fuerzas vivas, unan esfuerzos para que la imagen del Cristo Redentor, que fue quemada por un rayo en junio del 2015, sea reemplazada nuevamente para la cobertura de sus pobladores.

Pide trabajo

Otra petición especial que hizo la joven a la virgen de Los Ángeles, fue su intercesión para que la discriminación que existe actualmente en el sector agropecuario, no le siga impidiendo encontrar trabajo.

"Soy técnica en Producción Pecuaria desde hace dos años, pero allá no logran ver que ser mujer no es ninguna limitación para trabajar. Todos somos profesionales", explicó Noily.

Otra que se llenó de fe y se fue para Cartago fue doña Martha Isabel Gamboa, vecina de Alajuelita quien empezó la romería desde  La Galera, en Curridabat.

“Vivo muy agradecida con la virgencita porque me ha hecho muchos favores y mientras esté  con salud voy a continuarla (la romería). Le pido que me ayude a llegar hasta la Basílica y hacer la visita de rodillas. Siempre la hago antes porque no me gusta encontrarme con la presa de gente, eso trae dificultad para un montón de cosas y a veces uno no puede ni entrar a la iglesia", comentó Martha Gamboa mientras caminaba rumbo a su destino.

La vieron fea

La Cruz Roja indicó, a las 5 de la tarde de este sábado, que sus colaboradores atendieron a 26 personas durante el día en el puesto de la basílica de Los Ángeles, 24 de ellos por problemas médicos y solo dos por algún golpe. De los cuales solo uno debió ser trasladado al hospital Max Peralta.

La mayoría de los que necesitaron atención de los cruzrojistas eran oriundos de la provincia de Cartago (12), uno más que San José. Además 19 de ellos, estaban con edades entre los 20 y 59 años.