Junta reabre puertas a chanceros que un día se fueron

Setiembre se convertirá en el mes "del perdón" de parte de la Junta de Protección Social (JPS) hacia esos vendedores de lotería que un día decidieron hacerse a un lado y dejar de vender.

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Un acuerdo de la junta directiva de la JPS aprobó que en este mes que sigue les darán chance de que lo piensen mejor y regresen.

Para volver a ser vendedor de lotería se debe cumplir los siguientes requisitos: solo se aceptarán los casos en los cuales la persona dejó la venta por renuncia, cuando haya transcurrido al menos un año calendario desde que la JPS tiene registro de esa renuncia.

También, y eso importantísimo, que el chancero que quiere volver no cuente con registros de  denuncias o seguimientos por venta de loterías ilegales, especulación o venta condicionada. En este punto la presidenta de la JPS, Delia Villalobos, fue muy enfática.

Otro requisito que pide la JPS es que el chancero venda los productos en la localidad que se indique en el contrato y recibir de manera obligatoria al proceso de inducción que se lleve a cabo.

Los interesados deben presentarse en el sexto piso del edificio de la JPS, en el departamento de ventas, con la cédula de identidad  y la hoja de delincuencia al día.

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El capital de trabajo que se necesita depende de la cantidad de lotería que quiera, pero según la JPS, se habla de entre ¢1,4 millones y ¢1,7 millones. Los que sean aceptados para reingresar deben firmar un contrato con la JPS.