Mayoría de ticos condena uniones impropias entre adultos y menores

La mayoría de ticos condena las relaciones de matrimonio o noviazgo de un adulto con un menor de edad; sin embargo, alrededor de un 15% sí las aprueba y hasta afirman que son un derecho.

Esas son parte de las conclusiones de una encuesta elaborada por el Instituto de Estudios Sociales en Población (IDESPO), de la Universidad Nacional, con la que se buscó explicar cómo es el tico en sus relaciones con los vecinos y cómo percibe los derechos humanos.

Un 83,02 % de los encuestados no aprueba una unión entre un hombre adulto con una mujer menor de edad, pero ese porcentaje se reduce a 79,29 % si la unión impropia es entre una mujer adulta con un hombre menor de edad.

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Una parte de la población encuestada continúa percibiendo las relaciones impropias como legítimas, ya que entre un 15% y un 20% aseguró que las relaciones entre personas adultas y personas menores de edad son un derecho del que debería gozar la población.

También concluyeron que los ticos se las tiran de ser buenos vecinos y rajan con que respetan los puntos de vista de los demás, por eso prefieren el dialogo antes que meterse en broncas.

El vicerrector de Docencia de la Universidad Nacional, Norman Solórzano y la investigadora Sindy Mora explicaron el brete.

"La manera en que convivimos y establecemos las relaciones en lo político, económico y cultural define las acciones efectivas que podamos hacer en conjunto para combatir la violencia y el acoso sexual", aseguró Solórzano.

Se encuestó a 800 personas entre marzo y abril de este año. Las preguntas se hicieron mediante llamadas telefónicas a quienes aún cuenta con teléfonos en sus casas con el ICE.

La selección incluyó hombres y mujeres desde los 18 años hasta más de 55 y que en su mayoría han llevado algún tipo de educación.

Del total 62 de cada 100 aseguró que le provoca malestar de vivir cerca de personas que consumen marihuana y 61 cada 100 con los que consumen alcohol, pero solo 8 de cada 100 se incomoda por vivir cerca de personas homosexuales.

El estudio busca ser una herramienta que le dé pistas a los especialistas de cómo se pueden arreglar conflictos y generar formas para convivir en paz entre vecinos sin perjudicar los derechos de los semejantes.

No al acoso callejero.

Casi la totalidad de las personas están de acuerdo en que es necesario que se apruebe una ley que sancione el acoso callejero y reconocieron que en algún momento han sido testigos de alguna forma de acoso (verbal y no verbal, físico, audiovisual y actos graves) que sufren las mujeres a diario.

Solo en el 2016 se reportaron más de 6 mil denuncias por comentarios o piropos obscenos, roces sin consentimiento, envío de material pornográfico por mensaje a dispositivos electrónicos e intentos de abuso e inclusive exhibicionismos público, así lo explica el sitio web Observatorio de Violencia de Género contra las mujeres y Acceso a la Justicia.

"Tendemos a banalizar algunos comportamientos, por ejemplo, los piropos con contenido sexual, chistes frente a las agresiones físicas, ahí hay otro reto que la educación que podrá incidir para no restarle importancia al acoso callejero", dijo Solórzano.

Además, la consulta demostró que la mayoría está de acuerdo en que la mujer elija el método anticonceptivo sin pedir permiso a su pareja y qué sean ellas quienes decidan cuándo y cómo empezar su vida sexual con condiciones de igualdad sin distinción de género.