Turista de Cerro Pelado: "La gente va más por el selfie"

Gabriela Ledezma fue hace poco a Cerro Pelado con dos compitas y aunque le encantó el lugar, hubo algo que no disfrutó: ¡tanta gente!

El volcán de moda se volvió tan famoso que ahora es como estar viendo Ojo de Agua en sus mejores tiempos, solo que en versión guanacasteca y sin piscinas.

Según Ledezma, el día que ella fue había cerca de 100 personas y lo que la agüevó toda fue que no pudo disfrutar la naturaleza como a ella normalmente le gusta.

"Lo que es molesto es ver tantas pantallas de celular, aquello parece un concierto porque la gente no va a contemplar la naturaleza, sino a tomarse fotos y, está bien, es obvio que todo el mundo va a tomarse su foto en el lugar porque es muy bonito, pero hay gente que hasta con música va y no cualquiera, sino hasta reggaetón y eso le mata el ride a uno", expresó.

Aparte de eso, Gabriela dice que disfrutó mucho el viaje porque el lugar es mágico y cree que absolutamente todo el mundo debería ir.

"La vista es muy chiva porque se ve todo, ver el amanecer es todo místico porque tal vez es algo que uno no experimenta siempre", añadió.

Parte de lo que más le gustó a esta diseñadora gráfica es que ahí uno logra ver una faceta de Guanacaste que pocos conocen.

Ledezma dice que ella suele salir a caminar e ir al gimnasio, por lo que por eso no le costó, al igual que sus amigos, quienes sí hacen más senderismo que ella.

Sin embargo, reconoce que hay partes rudas por lo que si están pensando ir, ella si le recomienda a la gente, por lo menos, salir a caminar un mes antes para que no le cueste tanto.

Al ritmo propio

Y ya si la está viendo feo, dice que tampoco se deben preocupar mucho porque igualmente usted puede subir a su ritmo ya que no se trata de ninguna competencia.

Como si fuera poco, siempre hay un guía que se queda de último para ir recogiendo a la gente que se quede rezagada.

Gaby y sus compas planearon el viaje a principio de año, pagaron un paquete de 28 mil colones que incluía el transporte, el desayuno, seguro y el guía turístico.

Además, una pequeña visita a las cataratas de Llanos de Cortés.