Agentes tomaron Pacuare

Un movimiento policial la mañana del miércoles sorprendió a los limonenses quienes pensaron que los agentes del OIJ llegaron al barrio Pacuare para capturar un bichote, pero se trataba de la reconstrucción de un juicio contra el conocido Ojos Bellos.

Las autoridades llegaron a eso de las 6 a. m. y cerraron unos 300 metros de cada lado de acceso a ese lugar, algunos con sus caras tapadas y otros con pistolones, todo para revivir lo que pasó el 29 de julio del año anterior cuando dispararon 121 veces contra una vivienda y lanzaron una granada de fragmentación que por suerte no explotó.

La acción policial se dio por orden del Tribunal de Juicio de Limón que lleva a cabo el debate desde diciembre anterior en Goicoechea por razones de seguridad.

El juicio es por dos tentativas de homicidio y entre los imputados está Dinier Estrada Jiménez, conocido como Ojos Bellos y  Kelly Rojas, alias Chitá, y otros cuatro sujetos apellidados Casanova, Green, Clayton y Maxwell.

A ellos se les acusa de intentar matar a dos hombres de apellidos Johnson, de 30 años, y otro apellidado Hermann, de 29 años, quienes ese día se salvaron porque les avisaron que un comando  les iba a caer y se escondieron en el patio de la casa. 

Durante tres horas, los oficiales del Servicio Especial de Respuesta Inmediata (SERT) del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), abogados defensores y representantes del Ministerio Público estuvieron tratando de entender lo ocurrido ese día. Mientras que los vecinos con gran curiosidad se tiraban lo que ocurría desde las ventanas de sus viviendas. 

Hermann había sido señalado como sospechoso del robo de una droga y $2 millones, sin embargo, las autoridades presumen que él no estuvo implicado y más bien los sospechosos se habrían quedado con parte del cargamento y querían involucrarlo. A la vida de Hermann le habrían puesto un valor de ¢30 millones  por eso ya había sido víctima de varios atentados. 

El afectado dio su testimonio anticipado y desde ese momento no se sabe de nada. El hombre desapareció para proteger su vida. Incluso a Hermann le habían matado un primo cuando quisieron asesinarlo a él. 

El debate ha tenido montones de retrasos por incapacidades, testigos que no llegan por miedo, además el pasado 15 de marzo en Dondonia de Matama de Limón la esposa de  Kelly,  Roschelly Lawson Wright, de 27 años; su guardaespaldas, David Aragón Fernández, de 26 años, y los hijos de este último, de 4 y 5 años, fueron asesinados.

Los hijos de Kelly de 8 y tres años, así como la esposa de Aragón resultaron heridos, pero sobrevivieron. El atentado era contra Kelly pues pensaban que iba en el carro. 

Las pruebas documentales faltan en este debate para que empiecen las conclusiones.