Sucesos

Boda de reo le abre una herida a la modelo Karolina Brenes

Ella prefiere callar al darse cuenta del matrimonio de hombre que mató a su hermana en el 2003

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El privado de libertad Alonso Peña se casó con Maureen Esquivel el pasado 31 de agosto en La Reforma. La boda alegró mucho a la pareja, pero entristeció a los parientes de Vanessa Brenes, la muchacha a la que Peña asesinó en el 2003, hecho por el cual fue condenado a 46 años de cárcel (ha descontado 14).

Peña tenía 18 años y medio cuando mató a Vanessa Brenes González, de 32. Hoy Alonso reconoce que está muy mal lo que hizo, pero piensa que es estúpido pedir perdón a la familia de Vanessa pues no hay cómo borrar el daño cometido y todo el dolor y el sufrimiento que les causó.

Vanessa era hermana de la modelo Karolina Brenes, a quien le pedimos su parecer por el matrimonio de Peña dentro de la prisión. Karolina no quiso decir mucho, solo nos indicó que todo el mundo tiene derecho a rehacer su vida y que no quería hablar más al respecto porque es un tema que le produce mucho dolor a su familia, en especial a su padre, don Rodolfo Brenes.

Alonso recuerda que durante el juicio en su contra, don Rodolfo le dijo que siempre oraba por él y que no le pidiera perdón a él, sino a Dios.

"Creo que, aunque no es excusa, en ese tiempo (del crimen) era muy inmaduro. Uno jugaba de hombre y yo me sentía doña toda porque infundía miedo por donde pasaba. Me abrían campo por donde anduviera y eso me llenaba de ego", explicó el recién casado a La Teja este jueves desde la prisión.

Alonso, padre de cuatro hijos, nos dijo también que no quiere volver a delinquir, pero considera que aún no está listo para salir de la cárcel.

"Aún no estoy preparado para la libertad. Sí me gustaría tener una oportunidad para rehabilitarme, que me aseguren una verdadera reinserción en la sociedad", dijo.

Peña sacó el bachillerato en la cárcel, pero no siguió estudiando por falta de plata porque está en ámbitos cerrados, en los que no puede trabajar ni estudiar.

Mariano Barrantes, director de Adaptación Social, nos dijo esto: "Él (Alonso) como cualquier otro reo tiene los mismos derechos a estudiar y a trabajar. Además de optar por una reducción de la tercera parte de la pena una vez cumplida la mitad de esta. Podría optar por este beneficio dentro de nueve años, pues descuenta una sentencia de 46 años, pero para entonces deberá estar estudiando o trabajando".

El 22 de noviembre del 2003 fue cuando se apagó la vida de Vanessa Brenes, asistente judicial de 32 años, madre de una bebita de 8 meses y esposa del dueño del bar Brothers, en Guadalupe.

El mismo Alonso dio este jueves su versión de cómo ocurrieron los hechos: "Una empleada del bar (Brothers) a la que despidieron le dijo a su esposo que había cinco millones guardados en el bar y él me contactó para ir a robarlos porque a él lo podían reconocer. Busqué a tres compas y nos fuimos a asaltarlo".

"Estuvimos rondando el bar esperando que se vaciara un poco de gente porque estaba llenísimo. A las diez (de la noche) cerraron con la gente dentro y como las ventanas eran oscuras no podíamos ver nada, por eso no sabíamos cuánta gente había adentro. Nos quedamos acechando y nos dimos cuenta de que abrían cada vez que salía un cliente, por lo que ideamos aprovechar eso para entrar. El que salió en ese momento fue Alexánder, dueño del bar y esposo de Vanessa", continuó contando.

Cuando Peña y quienes lo acompañaban entraron al local se llevaron el sorpresón: el bar seguía llenísimo, pero ellos siguieron con el plan.

Ya tenían distribuidas las funciones: un hombre de apellido Mora cuidaba la puerta, Villaheredia se encargaba de controlar a la gente y Alonso iba por la plata.

"Vanessa estaba en la caja y me entregó la registradora, a la que ni le hice tiro pues no era nuestro objetivo. Me agaché por la gaveta donde nos dijeron que estaban los cinco millones y en eso ella comenzó a forcejear conmigo y me arrancó el pasamontañas. En ese forcejeo le disparé en el pecho. Ahí se me vino encima Jorge Leitón, un hombre bastante corpulento, y me dio un botellazo en la cabeza. Le disparé en el estómago, pero siguió luchando, me hizo una llave y le volví a disparar, esta vez en el brazo y le salió por el antebrazo, pero nada que me soltaba. Le disparé otra vez en el estómago y ahí ya empezó a perder fuerza, le di otro balazo en el pecho y cayó al piso. De la cólera por el botellazo que me dio le puse el arma en la mandíbula y le disparé. El tiro le pegó en un diente y le salió por el pómulo. Fue un milagro porque si le hubiese salido por el cráneo, lo mato", recordó el prisionero.

(Vanessa no murió de inmediato. Falleció una hora después en el hospital Calderón Guardia).

En el alboroto que se armó dentro del bar, Alonso y sus cómplices se quedaron adentro pues el portón eléctrico se les cerró. La gente comenzó a agredirlos con botellas y sillas, una de esas sillas fue la que les permitió romper la ventana y huir hasta donde los esperaba otro compa de apellido Chaves en un carro.

Del bar Brothers no se llevaron ni un cinco.

Todos lograron huir, pero fueron capturados el 9 de febrero del 2004 luego de cometer otro asalto en San Pablo de Heredia. Hubo una persecución por parte del OIJ y una balacera. Cuando Alonso y sus cómplices (los mismos del asalto al Brothers) iban por el puente de hamaca en Santo Tomás de Santo Domingo de Heredia se les jodió el carro y siguieron a pie por el montazal. Primero detuvieron a Chaves, que se encontraba herido; luego encontraron a Mora, que había caído a un guindo y a Alonso lo encontraron tres horas después, dentro de un cafetal.

Peña fue el único al que condenaron en el juicio, sus cómplices quedaron libres por falta de pruebas en su contra.

Alonso es uno de los 54 reos que el 29 de febrero del 2016 presentaron un recurso de amparo en la Sala IV para que se reformara el artículo 21 de la Constitución Política a fin de que se les permitiera la pena de muerte voluntaria.

Los firmantes fueron Francisco Madrigal y Alonso Peña, quienes pidieron al Estado que les den chance de optar por acabar con sus vidas en vez de seguir descontando una pena tan larga.

“No tenemos un plan rehabilitador adecuado, además no tenemos ninguna esperanza de una reinserción en la sociedad debido a lo alto de nuestras sentencias, que contrastan con la expectativa de vida de una persona”, dice el documento elaborado por reos del ámbito D de Mediana Cerrada de La Reforma.

La respuesta de la Sala fue negativa.

Karen Fernández

Karen Fernández

Periodista con una licenciatura en Producción de Medios. Forma parte del equipo de Nuestro Tema y tengo experiencia en la cobertura de noticias de espectáculos, religiosos, salud, deportes y nacionales. Trabajo en Grupo Nacion desde el 2011.

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