Mal olor delató asesinato de prestamista

El asesinato del prestamista Mario Herrera Loría, de 78 años, conmocionó este lunes a la comunidad de El Edén de Guatuso, en Alajuela. 

Un fuerte olor que salía de la casa del hombre hizo sospechar a sus vecinos de que algo malo le había ocurrido. Herrera era el hombre de plata del pueblo, por lo que a la gente le extrañó no verlo desde el sábado pasado. 

Su vecina doña Marlen Carmona decidió este lunes ir a tocar la puerta a eso de la 1 p. m., para ver que ocurría, pero según contó como no le abrieron, por lo que decidió asomarse por la ventana. 

"El olor era terrible y desde la ventana vi que estaba boca abajo. Cuando observé al señor fue un impacto terrible, se veían las cosas un poco desordenadas, parece que entraron a robarle. Dimos alerta a la Policía de forma inmediata", dijo doña Marlen. 

Don Mario era prestamista y las autoridades confirmaron que estaba tirado entre la sala y el cuarto, amarrado de pies y manos y con un paño metido en la boca. Además tenía golpes en la cabeza, pero por lo hinchado que estaba el cuerpo era imposible determinar si tenía heridas de puñal o de bala. 

El fallecido era papá de cuatro hijos y vivía solito. Según trascendió, ya le habían robado en otras ocasiones, la última vez fue hace un mes cuando se llevaron un millón de la vivienda, pero él no estaba en ese momento. 

"Mi cuñada me llamó y me dijo que tuviera paz, yo en ese momento pensé en mi esposo y en mi hijo. Ella me dijo que encontraron a mi papá amarrado, yo le pregunté que sí estaba muerto y ella me dijo que sí. Papi no tenía enemigos, la gente le tenía cariño", dijo muy afectada su hija, Margarita Herrera. 

El juez Pedro Mejías y la fiscal Daniela Alfaro ordenaron el levantamiento del cuerpo, sin embargo, solicitaron que la casa quedara en custodia de la Policía hasta este martes para que a primera hora empiecen a buscar evidencia que permita dar con los asesinos del viejito. 

Se presume que un nuevo robo habría sido la causa del asesinato.