La tormenta tropical Nate es uno de los "personajes" que nos dejó más dolor a los ticos en este 2017 que termina. Su fuerza nos golpeó el 4 y 5 de octubre pasados, las autoridades informaron a tiempo que venía un gran peligro, pero se quedaron cortas.
Nate dejó una marca imborrable para 14 familias que perdieron seres queridos. La lista de fallecidos es esta;
- Sergio Rodríguez, 21 años, y Rubí Urbina, de 24, Cartago
- Sofía Sánchez Pereira, 3 añitos, Tarrazú
- Mauricio Jesús Madrigal Jiménez, 37 años, Guayabo de Mora.
- Roy Matamoros Madrigal, 36 años, Sarchí
- Claudia Aguirre Castillo, 56 años, Santa Cruz, Gte.
- José Vicente Chacón Aguilar, 19 años, Atenas
- Marco Tulio Rojas Quirós de 43 años, Santa Cruz
- Daniel Mejía Quesada, 58 años, Hojancha
- Eliécer Godínez Rojas, 65 años, Quepos
- Dennis Hernández Acevedo, 47 años, Sardinal.
- Kevin Figueroa Obando, 14 años, Buenos Aires.
- José Francisco Arias Moras, 55 años, Acosta.
- Cuerpo de hombre sin identificar en puerto Níspero, Guanacaste
El impacto económico en el país fue devastador. El presidente Luis Guillermo Solís reconoció que los daños por la tormenta son la mayor crisis que Costa Rica ha registrado en su historia. En el MOPT definieron la destrucción como "titánica".
Los aguaceros fueron interminables, la zozobra en algunas comunidades terrible. Había oraciones y súplicas para que dejara de llover. Fue necesario mover a 11.517 personas a los 178 albergues que se abrieron pues en algunas de las zonas azotadas el agua arrancó viviendas o llegó a los techos.
Nate tocó 76 de los 82 cantones del país y fue más devastador que el huracán Otto, que nos impacto el 24 de noviembre del 2016.
Además de daños a viviendas, hubo problemas con electricidad, agua, caminos y puentes destrozados. En total 3.496 centros educativos resultaron afectados.
A la pura suerte
Muchas familias quedaron incomunicadas por varios días. En el Cerro de la Muerte hubo dos buses atrapados en medio de dos deslizamientos. En esa zona son visibles las heridas que dejó el fenómeno.
La magnitud de los daños provocados por la tormenta superaron en mucho la capacidad de respuesta de la Comisión Nacional de Emergencias.
El Gobierno estima en $385 millones el costo de la reconstrucción de toda la infraestructura destruida.


