Johnny Acosta y Keynner Brown jugaron el miércoles ante el Saprissa, con el clavo si será su último partido de la temporada porque el Tribunal disciplinario estudia si los castiga o no, por los hechos ocurridos el 29 de abril en la Cueva.
Los videos muestran como los futbolistas agredieron sin balón al morado Fabrizio Ronchetti, por lo que la directiva morada pidió una investigación y un castigo para los florenses, con base en las evidencias de las tomas de televisión.
Este viernes se definirá si son castigados o no por el Tribunal, mismo que el martes castigo con tres partidos de sanción a Elías Aguilar por insultar al árbitro Keylor Herrera cuando estaba sancionado y no podía estar en el terreno de juego.
"No sé que irá a pasar el viernes, lo que me extraña es que lo hagan hasta ese día, lo pudieron haber hecho el martes junto con lo de Elías. Vamos a presentarnos Keyner y yo y dos jugadores de Saprissa (Ronchetti y Heiner Mora), hay que ver qué es lo que piensan ellos (el tribunal), espero que todo se resuelva", comentó Acosta.
Al defensor lo acusan de meterle un puñetazo en la parte baja de la espalda al delantero charrúa.
Por su parte, Brown también se siente bateado y reconoció que es difícil estar concentrado sin saber si podrá jugar el domingo ante Limón en el juego definitivo de la cuadrangular.
"Ya a lo interno hablamos del tema y si el Tribunal toma la decisión de castigarnos se sale de nuestras manos, no se puede hacer nada. Uno siempre quiere jugar, pero también debe hacerse responsable de sus actos, son cosas que pasan en los partidos y uno más bien se arrepiente. Solo queda descansar, estar tranquilo y ver que decide el comité", dijo Brown.