Alajuelense apoyará la medida cautelar presentada por Unafut el viernes y mantendrá el 25% del aforo en el estadio Alejandro Morera Soto.

“Nuestra institución ratifica que está lista con todas las medidas sanitarias para garantizar la salud de cada uno de los asistentes al estadio Alejandro Morera Soto y recibirá el 25% del aforo este miércoles 24 de noviembre ante Guadalupe”, informó el club erizo en un comunicado de prensa este sábado.

Alajuelense es uno de los ocho clubes a los que el Ministerio de Salud les aprobó el protocolo para contar con aficionados en sus estadios, desde el 15 de noviembre.

Con el 25 por ciento del aforo, los manudos pueden recibir a 4.425 personas en la Catedral, según datos de Unafut.

Pérez Zeledón también acuerpa a la Unafut y comunicó que mantendrán el aforo del 25%.

“El Estadio Municipal de Pérez Zeledón abrirá sus puertas y recibirá 25% de aforo el próximo martes 23 de noviembre a las 5 p. m. para el choque ante Sporting”, comunicaron los generaleños.

Molestia por cambio de medidas

Unafut se opone a la medida que dictó el Gobierno la noche del jueves, en la que comunicó que solo los equipos que pidieran el código QR podrían mantiene el 25% de aforo. Mientras que a los que no lo hagan, solo podrán recibir un 15%.

Por eso, el viernes en la tarde la Unafut presentó ante el Tribunal Contencioso Administrativo una medida cautelar, en la que expresa su malestar por el cambio de medidas tan a destiempo.

La molestia se dio porque el cambio de medidas se dio 24 horas antes de que Pérez Zeledón recibiera, con público, a Cartaginés (el partido quedó 3-0 a favor de los locales).

Incluso, por el repentino cambio, Saprissa comunicó la noche del viernes que redujo de un 25% a un 15% la capacidad de aficionados que ingresarían este sábado a la Cueva para el partido contra Sporting (8 p. m.).

“La molestia general del ente rector y los clubes afiliados, tras el cambio abrupto de las nuevas medidas impuestas por el Gobierno y comunicadas la noche del jueves 18 de noviembre, que significan un atropello a la planificación de los clubes de la primera división de cara al regreso de los aficionados a sus estadios.

“Se busca anular la resolución improcedente, carente de fundamento jurídico y contraria a la disposición judicial que suspendió la exigibilidad del código QR para gozar de un aforo del 25% de la capacidad real de los recintos deportivos en los que están programados de la Liga Promerica”, informó la Unafut.