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Alajuelense se desploma entre la desesperación y la falta de confianza

Alajuelense cae ante el Santos y deja ir primer lugar del torneo

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¿Qué pasó con el superlíder? La Liga, que muchos decían que jugaba sobrada, en solo cuatro días sumó dos derrotas en casa, luego de perder este domingo 2-0 ante el Santos, en una tarde que no le salió absolutamente nada y hasta le cedió el primer lugar del torneo al Saprissa. Cartón lleno.

Gracias a su triunfo en Guanacaste, Saprissa tiene 27 puntos y los erizos 26.

La resaca y el golpe del jueves ante Los Ángeles FC aún se siente en los manudos, golpeó en la gente, en la confianza, en las decisiones del equipo y hasta en la suerte.

Las que en los otros partidos siempre entraban, no lo hicieron esta vez, el pase que siempre sale, ahora no, el suplente que lo hacía de buena manera, esta vez se perdió, todo salía al revés.

Desde antes que empezara la mejenga, la mala vibra se notaba en la misma afición, a la Catedral apenas llegaron unos pocos fieles para ver al León en el partido que se suponía se lavaría la cara. Las redes sociales manudas eran una muestra de cómo se sentía la gente.

Un juego de estos no hace sino darle la razón a todos los que dudan y que el golpe sufrido es más fuerte de lo que muchos esperan, si el miércoles vuelven a caer ante Los Ángeles, serían cuatro derrotas en sus últimos cinco partidos, lo que parecía impensado en este equipo hace apenas unas semanas.

Sin duda es un tema para ponerle atención, están con pie y medio afuera de la Concacaf, perdieron el primer lugar de la tabla y, con solo ver, también la confianza y hasta un poco la compostura.

Es cierto que los métodos de Santos para sacar el triunfo no fueron los más elegantes, se tiró atrás, se dedicó a perder tiempo, tuvo mucha suerte en varias jugadas de esas que eran increíbles, pero cuando se está jugando un descenso, uno se agarra de cualquier cosa.

Es que hasta este punto hemos hablado solo de la Liga, pero hay que ver qué significa el resultado para el Santos, es sacar oro puro, porque era una fecha en la que los tres equipos metidos en la bronca del descenso se medían a los tres más ganadores del fútbol tico, quien sacara puntos la hacía toda. Junto a Saprissa, fueron los grandes ganadores de la fecha.

En ofensiva Santos no hizo mucho, es cierto, tuvo el gol de Starling Vega Matarrita, quien cerró una jugada adentro del área luego de un gran centro de Luis José Hernández a los 27 minutos. Un tanto con la duda si el anotador estaba adelantado en el momento del centro.

Hasta el gol, los erizos habían hecho muy poco con el juego, parecían desconocidos, hicieron solo tres tiros a marco en todo el primer tiempo, cuando suele generar mucho caudal ofensivo. Dos de ellos fueron tapadones de Alexandre Lezcano, primero a Johan Venegas y luego a Freddy Góndola.

En el segundo tiempo el partido se resume fácil. La Liga ahora sí la tuvo por todo lado, en todas las formas y colores, por las bandas, por el centro, con cuatro delanteros, Venegas, Góndola, Doryan Rodríguez y Ángel Tejeda, pero no hubo por dónde.

Los fiebres que sí se animaron a ir se agarraban el pelo en las gradas porque las opciones eran una más clara que la otra, los fallos en muchos casos rayaban en lo ridículo, porque ya no eran solo las tapadas de Lezcano, eran los postes o fallos solos frente al marco.

Venegas, Doryan, Giancarlo González, Aarón Suárez , no había nadie que la echara. En la desesperación, Carevic hasta le robó una página a Jeaustin Campos y tiró a su defensa más alto, Alexis Gamboa, como delantero, pero no pesó en nada, muestra que no es un receta que se hace así no más.

A la Liga ni siquiera le ayudó el tino arbitral, cuando Lezcano se jaló un penalazo sobre Venegas, que el réferi William Mattus no pitó, pero si al final perdió, las cosas van mucho más allá de este hecho.

Metido totalmente en su área, el Santos prevaleció, aguantó la metralla ante un rival al que los fantasmas de una derrota dolorosa lo acosan y lo sacó otra vez sus peores temores, una muestra más que la parte mental sigue siendo uno de sus principales enemigos.

De feria, en el último minuto, al 95′, Carlos Rivera se jaló un pepino escandaloso que se metió un ángulo para matar de un solo golpe las ilusiones erizas.

Fue un golpe al ego, porque tiró desde un ángulo realmente imposible desde la banda izquierda, mientras que su rival no pudo echar uno solo bajo el marco.

Es el momento para que Carevic demuestre cuánto ha cambiado, cuánto ha evolucionado como entrenador y cómo puede hacer para darle vuelta a las cosas cuando realmente ya se le pusieron difíciles y la gente reclama con toda la razón del mundo.

Sergio Alvarado

Sergio Alvarado

Periodista de La Teja, especializado en deportes. Graduado de la Universidad Internacional de las Américas.

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