Corre con su melena al viento en el ataque o mete pata y marca cuando toca defender, Yeison Molina es de los futbolistas que se hace notar en Jicaral Sercoba.

La historia de este atacante convertido en defensa, oriundo de Pilas de Bejuco, Nandayure, es de las más curiosas en el cuadro peninsular, equipo del que es una de las principales figuras a sus 23 años.

¿A cuántos jugadores los descubrió un árbitro? Pues este es el caso del goleador del once dirigido por el técnico Jeaustin Campos.

El fútbol es algo que se respira en la familia de este joven baluarte, en la que todos juegan, hasta la mamá, Mirta, quien jugó como portera hace algunos años. Su tata y sus tres hermanos también son bien fiebres y todavía mejenguean, según nos dijo Yeison.

“Yo vengo de un pueblito muy humilde, de gente sencilla, siempre me ha gustado el fútbol. Cuando estábamos en un campeonato, allá en mi pueblo, un árbitro llamado Álvaro, que vive cerca de Jicaral y conocía al técnico del alto rendimiento, me vio y me dijo que fuera a hacer una prueba”, contó el atacante.

Cuando llegó a Jicaral, jugó un partido y lo vio Rónald Mora, quien era el técnico del primer equipo en ese momento y se lo llevó para la segunda división.

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“Yo vivo en la casa club de Jicaral, cuando llegué al equipo me tocó separarme de mi familia, vivo superagradecido con ellos que me apoyan en mi sueño de ser futbolista y jugar en primera”, indicó.

Chon, como le han dicho toda la vida, es de los jugadores que ha estado en las dos finales que el cuadro porteño ha disputado por el ascenso a la primera división.

Polinfuncional

Cuando Yeison llegó al club era nueve, la posición que jugó desde chiquillo, pero en los entrenamientos a veces lo ponían de defensa central, lateral o hasta volante, por lo que ha andado por toda la cancha.

Sus condiciones lo han hecho convertirse en un defensa goleador, en el Clausura 2019 de la Liga de Ascenso marcó seis pepinos y es la carta que se saca Jeaustin de la manga cuando necesita goles.

“En partidos anteriores el profe me utilizó de nueve, contra As Puma entré de delantero y en el partido primer partido ante Palmares, pero ya llevo bastante tiempo jugando de central”, indicó.

Algunos comparan a Molina con Kendall Waston porque al gigantón de la Sele Jeaustin también lo ponía de defensa, pero cuando estaba urgido de un golcito lo mandaba al ataque.

Curiosamente atajar, como lo hacía su mamá, es el único puesto que le falta en el cuadro jicaraleño, cuidado y no si un día expulsan al portero y ya no hay cambios el hombre se anima y se pone los guantes.

Estas condiciones han hecho que Chon se vuelva una de las piezas de confianza de Campos, quien sabe que puede acomodar al muchacho según la situación de la mejenga.

“En lo personal su trato conmigo ha sido muy valioso, sabiendo su trayectoria, donde estuvo, lo que ha ganado es importante, estoy muy agradecido con él porque en lo que ha estado me ha dado toda su confianza y me toca cumplirle”, comentó.

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Jeaustin le ha pasado bolados importantes para mejorar su juego defensivo a la hora de marcar, saltar, hacer pantallas, cosas mínimas que marcan grandes diferencias.

Este domingo en el estadio Chorotega de Nicoya hay que estar atentos para ver en que posición juega Yeison porque siempre puede sorprender.