Así vivieron dos comunicadores el Mundial Italia 90

Copa Mundial trae una tonelada de recuerdos

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Cuando la selección de Costa Rica viajó al Mundial Italia 90 había un universo de dudas y un mundo sin explorar por delante y con esa misma sensación empezó la aventura la prensa tica.

Aquella Copa del Mundo, que cumple ya 30 años de jugada, tiene un carácter especial para los aficionados ticos y el aniversario revivió recuerdos de dos comunicadores que tuvieron el privilegio de cubrirlo: el comentarista Hernán Morales y el periodista Rodolfo Martín.

Al hablarle de Italia 90 a Hernán se le vienen a la mente los más lindos momentos que vivió en los micrófonos al lado de su entrañable amigo y compañero Manuel Antonio “Pilo” Obando, quien falleció en el 2014.

Trabajando para Canal 2, Hernán viajó a Europa con Pilo y Álvaro Allen, quien era el gerente de deportes de la televisora, y entre los tres se la tuvieron que jugar como vikingos para generar la transmisión para Costa Rica y enviar imágenes al país con la tecnología de entonces, cuando Internet era un sueño.

“Es las más grande de las experiencias que uno puede vivir metido en este ambiente, lo sentía como si uno fuera parte de una de las épocas más lindas en el fútbol, algo único, más estando Costa Rica presente por primera vez en un Mundial y con una historia que resultó muy linda”, dice Hernán.

“Recuerdo del partido contra Suecia que Pilo estaba muy metido en el juego y cuando Medford se va y anota (el segundo gol) hasta se me olvidó que el grito de gol era de Pilo y lo canté antes, lo festejé como pocas veces. En la mente siempre me rebota ese ‘Medford, Medford, Medford, Medford’ de Pilo y se me eriza la piel al recordarlo”.

Hernán pegó el resultado de la mejenga contra Escocia y se lo cantó a unos aficionados escoceses que entrevistó antes del partido.

“Fuimos con una camarita que parecía de juguete, me tocó hacer unas entrevistas y me topé a unos escoceses que andaban muy rajones con su equipo. Estaban muy eufóricos y no sé si medio entonados (tapis), me la jugué a preguntarles cómo quedaba el partido y todos ellos decían que iban a ganar.

“Al verlos no sé por qué se me ocurrió pero les dije ‘Costa Rica it’s gonna win 1-0′, creo que ni me dieron bola, ese es el único marcador que he pegado en mi vida, creo”, contó riendo.

Otra anécdota ocurrió en el estadio Delle Alpi, en Turín, el día en que la Sele jugó contra Brasil. En una cabina de transmisión cercana a la que ocupaban ellos vio a Pelé, que estaba de comentarista para un canal brasileño, pero por la cantidad de gente que tenía alrededor era imposible llegarle.

Mucha presión

Si los jugadores de Costa Rica sentían presión por jugar por primera vez un Mundial, para Rodolfo Martín, el único representante de la prensa escrita costarricense en la Copa, la situación era la misma.

El periodista fue enviado por La Nación y no olvida cómo enviaba sus crónicas y notas por fax hasta Costa Rica, pasando las hojas una a una y hasta con la ayuda de mucha gente.

Margarita Penón, primera dama de entonces; los hijos del directivo Fabio Garnier y hasta la esposa del técnico “Bora” Milutinovic lo ayudaron a llevar las hojas al fax mientras él escribía. Ellos fueron testigos del estrés de aquellas jornadas por pasar material periodístico a tiempo.

Las fotos las pasaba por un viejo sistema telefónico en el que Dios libre alguien colgara la llamada porque se interrumpía el envío y había que hacerlo de nuevo. Mandar cada foto tardaba doce minutos.

“La diferencia de ocho horas jugaba en contra porque cuando me pedían algo a las diez de la mañana en Italia eran las seis de la tarde. Había momentos en que a las cuatro de la tarde se pedía un cambio de enfoque o una entrevista y acá era la madrugada, esa era la bronca”, explica el popular Fo.

“Me pasó el tener que ir a tocarle la puerta a Bora a las dos de la mañana para pedirle la reacción a una cosa, porque estábamos en el mismo hotel. Siempre fue muy abierto en esa parte y atendía, entendía muy bien la situación y nuestro trabajo”, añade Martín.

Otro detalle inolvidable fue el cariño que el italiano mostró por los ticos en esa Copa del Mundo. Decir que era costarricense era recibir saludos y que se le abrieran puertas en muchos lados.

Cuando regresó al país, Rodolfo Martín recibió un reconocimiento de parte del Colegio de Periodistas por su trabajo en el Mundial; ese galardón lo dedicó a sus compañeros de sección de entonces.

“Mi trabajo fue visible en San José por el respaldo de un equipo maravilloso con el que contaba, si yo no hubiera contado con el apoyo que tuve en la sección con Ricardo Quirós, que Dios lo tenga en la gloria, Fabio Vega, Roberto García, y otros, no habría sido posible”, rememoró.