Pep Guardiola es uno de los técnicos más influyentes e imitados en el mundo, muchos quieren copiar o seguir su estilo, pero es muy usual que la mayoría fracase en el intento.

Entender el método que ha hecho tan exitoso al entrenador catalán no es soplar y hacer botellas, hay muchos detalles en medio que se suelen ignorar y aun conociéndolos, son difíciles de replicar.

Albert Ballesteros, un español de 27 años y entrenador de las divisiones U-14 y U-15 de Alajuelense, ha estudiado por bastante tiempo esta idea, tanto así que hasta escribió un libro al respecto.

Al igual que Pep, Albert también viene de Cataluña. Estando allá, una editorial para la que colaboraba haciendo análisis de fútbol, le propuso la idea de hacer un libro y él tiró el nombre de Guardiola.

“Pep táctico” es un libro que se mete de lleno en la idea del originario de Sampedor, Barcelona, de buena aceptación en España y que ha sido motivo de diversos artículos y análisis.

“Es el entrenador que más he seguido, si bien esto lo decía un buen amigo mío de España llamado Dani Fernández, profesor mío y de Vidal (Palomo, director de ligas menores de Alajuelense), si bien Mourinho cambió la manera de entrenar, Guardiola cambió el sentido colectivo del juego a partir de sus equipos.

“Es un equipo muy protagonista con el balón, ves que todos juegan en todo momento, que funcionan como un reloj, cómo potencia a los jugadores de manera individual a partir de lo colectivo. Los principios de juego que no se discuten para nada, vayas adonde vayas, pero saber adaptarte”, dice.

Cualquiera pensaría que el español trata de imitar ese estilo con los equipos que dirige en Alajuelense, pero aclaró que no.

“No es lo mismo atacar con Messi, Henry y Villa que con Robben, Ribery y Lewandoski, las relaciones son distintas, la manera de progresar y atacar son distintas, por eso es un entrenador tan inteligente, donde ha ido siempre ha ido a imponer su manera de jugar y hasta a manera de país, ahora ves a más equipos jugando en Alemania que hace diez o quince años.

“Si tienes a un entrenador que le gusta el juego directo, que es como juega siempre en sus equipos y todos sus delanteros son de 1.70 y le impone al equipo jugar directo, es posible que esos delanteros pierdan todos los duelos con defensas más altos, terminas hasta haciendo ver mal a los jugadores”, explica.

Antes de llegar a la Liga, pudo compartir con estrellas como Xavi Hernández, leyenda azulgrana y campeón del mundo, con quien estuvo cinco días en Catar viendo cómo trabaja en el club Al-Sadd. Allí llegó por la amistad que tiene con Óscar, hermano del crack catalán.

Recién llegado

Albert llegó a Tiquicia en enero por un amigo en común que tiene con Vidal Palomo y Agustín Lleida y se ha sorprendido de lo que se ha encontrado en Alajuelense en muchos términos. Cree que a nivel de cantera es un nivel potente, similar con Cataluña.

“Tenía algunos conocidos, el entrenador que estaba aquí y ahora está en el Barcelona (Sergi Runge), sabía que la estructura de jugadores que estaban formando a nivel de jugadores era muy potente, pero lo que me ha sorprendido más es el nivel de rutina y de profesionalismo que ya hay en categorías menores y como esto les ayuda al objetivo final que es dedicarse a esto como profesionales.

“Este CAR es un privilegio creo que a nivel mundial, sin ánimo de exagerar, porque en España esto no era muy común a nivel deportivo, creo que el club está dando pasos muy grandes al mantenerse en una misma idea y no perder identidad, con muchos nacionales”, explicó.

En la U-14 a Ballestero le ayuda, como asistente técnico, Junior Díaz, defensor erizo que ya va dando sus primeros pasos en la dirección técnica con jóvenes, algo que le gusta.

Más allá de poner a sus jugadores a que jueguen como un equipo de Pep, Albert busca que aprendan a pensar en el fútbol como un todo y a cambiar depende de las circunstancia.

“Siempre se parte con la idea de juego que sean muy flexibles, que puedan adaptarse a lo que el rival te da o te quita, porque el rival también juega, nosotros enfatizamos mucho como entrenadores que el jugador sea la parte principal de su avance en el juego, que él sea quien pueda reconocer las cosas y se de cuenta por si solo si hoy toca por aquí o por allá.

“Todo eso se hace conociéndote, entrenando mucho, no reaccionando, porque cualquiera reacciona, el que lo intenta ver antes, el que va un paso antes, este es el jugador bueno y a eso vamos, estoy muy sorprendido porque los chicos lo están agarrando muy rápido, les exiges cosas de un nivel alto de compresión de juego y lo entienden”, agregó.

Albert espera ir poco a poco impregnado a sus jugadores una visión de juego exitosa, pero ante todo que sepan cómo aplicarla, porque no es solo contarla, es que pueda hacerse.