Brasil es uno de los grandes que sigue con vida en Rusia 2018

Neymar exhibió toda la fantasía de su juego, con un gol, fintas, asistencias y desbordes. También irritó al rival por exagerar más de la cuenta cuando le cometían faltas.

Con un gol y una asistencia, el futbolista más caro del planeta quedó en la mira de todos cuando Brasil despachó este lunes 2-0 a México para avanzar a los cuartos de final de la Copa Mundial.

Mientras las grandes selecciones caen en un Mundial traicionero, Brasil despliega solvencia y oficio en Rusia.

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El gol de Neymar, a los 51 minutos, finalmente rompió la muralla de Guillermo Ochoa en el arco. Roberto Firmino sentenció a los 88' y Willian redondeó una actuación monumental para la victoria de la Canarinha en Samara.

“Ellos tuvieron un gran partido, pero yo no me rindo nunca”, dijo Neymar sobre su segundo tanto del torneo. “Soy brasileño y fue un gol lleno de ganas, de estar metido en el partido”.

Pero Neymar también responde a cuestionamientos sobre si es un jugador que disimula demasiado para que se piten faltas: “Me parece que tratan de dañar mi imagen más que nada”, replicó.

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En la búsqueda de su sexto título, Brasil se enfrentará ahora contra Bélgica. Será la sétima vez seguida que la Selecao aparece en los cuartos de final, una instancia a la que no se han ausentado desde la edición de Estados Unidos 1994.

La otra cara

México se va de Rusia 2018 sin su ansiado quinto partido: por sétima vez seguida se estrella en la primera salida de la fase de eliminación directa de un Mundial.

“Lo triste para nosotros como mexicanos es que solemos hacer buenos partidos, pero el resultado siempre es el mismo, ya estamos cansados”, dijo Andrés Guardado.

“No sé en qué momento podamos cambiar esto, no sé qué es lo que tenemos que cambiar para que el fútbol mexicano dé ese paso”, indicó el jugador azteca.

Brasil supo contener el intenso despliegue de México, al que le faltó profundidad al momento de acercarse al área y abusó de remates de larga distancia que poco inquietaron al arquero Alisson.

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Para Brasil fue cuestión de martillar y martillar hasta que pudieron batir a Ochoa, el notable arquero mexicano que parecía invencible hasta que Willian apareció como bala en el área, sirvió un centro frente al arco y Neymar estiró la pierna en el segundo palo para adelantar a Brasil.

“Es un gran portero”, dijo Neymar sobre Ochoa. “Tiene una calidad enorme”.

Casi sobre el final, Ochoa desvió apenas una entrada de Neymar y el recién ingresado Firmino anotó el segundo.

La estadística arrojó que Ochoa paró ocho remates, varios con aroma de gol.

“No puedo estar contento porque México no avanzó”, dijo Ochoa.

Neymar suma 11 goles y nueve asistencias en sus últimos 19 partidos con la Verdeamarela.

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Pero por un momento dio la impresión que su segundo Mundial corría peligro. A 20 minutos del final, fue blanco de un majonazo en el tobillo derecho, propinado por Miguel Layún. La falta fue evidente, pero también el teatro para expresar dolor fue evidente.

Neymar logró reincorporarse, pero sin antes tratar de desquitarse con el jugador mexicano. Ninguno fue amonestado.

Culminado el partido, Osorio reprochó a Neymar, sin mencionar directamente su nombre.

“Es una gran vergüenza para el fútbol que se pierda tanto tiempo con un jugador”, dijo Osorio. “Esto debe ser un juego de hombres y no con tanta payasada”.

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Layún añadió que sabe de la calidad de Neymar, “pero también de sus mañas”.

“Es increíble que apenas te le acercas, brinca y está en el suelo”, añadió.