La cancha del Estadio Nacional, en La Sabana, luce impecable para el partido de este jueves, a las 8 p.m., entre Costa Rica y Panamá, por la eliminatoria mundialista.
El manto verde de césped natural de la joya está intacto, pese al aguacero que cayó la tarde de este lunes, el más fuerte en los últimos 22 años, y que provocó inundaciones en varias zonas de la capital y Paraíso de Cartago.
Costa Rica será local este jueves y también el próximo martes, a las 8 p.m., ante Trinidad y Tobago, por la jornada cinco y seis de la eliminatoria de la Concacaf, rumbo al Mundial de Rusia 2018.
Para la mejenga contra los canaleros ya no quedan entradas, mientras que para el choque ante los trinitenses quedaban 7.400 el lunes, a las 6:43 de la tarde, según informó la Federación Costarricense de Fútbol, en su perfil oficial de Facebook.
Los cuatro conciertos realizados ahí desde el 24 de abril, cuando se dio el show del cantante canadiense Justin Bieber, no le hicieron daño a la gramilla.
La tienen chineada.
Ricardo Chacón, gerente general del estadio, explicó los chineos que le dan a la cancha para que esté impecable.
"Hemos coordinado con Agrícola Roca (encargados de la cancha), los productores de conciertos nos han ayudado mucho a la hora del montaje y desmontaje de las tarimas.
"También hemos implementado algunas técnicas que se usan en otros países, por ejemplo, poner lámparas debajo de las tarimas, a la hora de los conciertos, para que la gramilla mantenga su color", comentó Chacón.
Don Ricardo explicó que dependiendo de los conciertos, las productoras usan la cancha en un 50 por ciento o totalmente.
Además, han hecho cortes verticales para que la maleza de la gramilla salga, así como tratamientos con fungicidas, entre otros productos.
De aquí al jueves , la cancha recibirá cortes verticales y horizontales para que luzca espectacular a la hora del partido.
"Se ha lavado la pista sintética de atletismo, se arreglaron los palcos, se hicieron trece rampas para discapacitados, se pintó todo el interior del estadio", añadió don Ricardo.