La goleada del Cartaginés 3-0 a Guanacasteca este miércoles tuvo doble propósito, dejar a los brumosos muy cerca de las semifinales del Clausura 2022 e ilusionar a Jicaral con la posibilidad de no descender.

El equipo que vio con mayor interés el duelo en el estadio Fello Meza fue precisamente el conjunto peninsular, que estaba cruzando dedos para que sus vecinos no sumaran en la visita a la ciudad de las brumas, para mantener alguna esperanza.

El Huracán no solo deseaba que perdieran los pamperos, sino que ojalá los golearan, favorcito que le hicieron los blanquiazules con un triunfo contundente. Este miércoles los brumosos cambiaron los empujones por los abrazos.

Ganar también era obligación para los centenarios, porque después de perder 3-2 en San Carlos, no se podían dar el lujo de no sumar en esta fecha, pues ahí sí ponía la clasificación en verdadero peligro.

El caprichoso calendario hizo que el descenso esté en manos de Cartaginés, porque este miércoles ayudó a que Jicaral siga vivo, pero el domingo les toca enfrentarlo en la Península.

Jicaral, si quiere permanecer en primera, debe vencer 2-0 a Cartaginés y esperar que Guadalupe le meta el hombro y se suene a la ADG por el mismo marcador.

Bien jugado

Hay que decir que este miércoles los azules manejaron bien el partido, salvo al inicio, en el que sufrió un poco debido a su falta de claridad.

A partir de los 20 minutos el equipo se acomodó y empezó a presionar el marco de Antonio Torres, portero mexicano que pese al marcador, mostró buenas cosas, como la tapada que le hizo a Jeikel Venegas, un remate desde afuerita del área en el que el guardameta tenía mucha gente al frente y aún así sacó la tarea.

En el Fello Meza estaba cayendo un baldazo de esos bravos, similar al aguacero que caía en el marco pampero. El marcador se abriría al 23 por una falta de Fernando Piñar sobre Dylan Flores adentro del área.

Marcel Hernández cobó y la mandó a guardar con un remate al puro centro y arriba, mientras que Torres se acostó al lado izquierdo.

Como si el partido no se le estaba haciendo lo suficientemente pesado a la ADG, el árbitro Ricardo Montero se fue en todas pitando un penal que nada que ver.

Venegas se resbaló por el punto de penal y por la inercia de la jugada pegó con Torres que venía saliendo, pero no existió la falta que vio el réferi.

Ya el penal estaba pitado y no había nada que hacer. Al 31, Marcel de nuevo lo cobró, ahora la pegó al ángulo de la izquierda del meta y el portero se acostó a la derecha.

El tanto es el número 14 de la campaña para el cubano, que está solo en la cima de goleo.

Guana se desordenó, nadie podía siquiera tomar la pecosa, no aparecían Brandon Aguilera ni Joseph Bolaños en la media y arriba Anthony Contreras se moría de soledad.

De feria, al 35, cayó el 3-0.

Los locales recuperaron atrás, salieron rápido, Dylan tomó la pecosa y se la puso a un José Luis Quirós que venía corriendo por el costado derecho.

El lateral la definió como crack: se quitó dos marcas y cuando le salió el portero la acomodó al vertical derecho, un pepino por la jugada y la definición.

Ahora sí, Marcel cambió el empujón que le metió el domingo en San Carlos por un abrazo fuerte por el golazo.

Para el segundo tiempo, la ADG al menos pudo aguantar el no recibir más goles, porque cada pepino en contra hacía la bronca más grande para la fecha final, a la que irá rezando que los brumosos le apliquen a Jicaral la misma receta que a ellos.