La Navidad llegó este jueves al hogar del exjugador saprissista Christian Bolaños y él tomó la decoración de su casa, en Kristiansand, Noruega, con una actitud solo vista en el taller de Santa.
Se emocionó tanto que se puso a bailar al ritmo de... villancicos.
El asunto es que su esposa, Jazmín Salas, compartió varios videos en los que se ve a la familia comprado el árbol, luces, adornos y ya una vez con todo en casa, ponen manos a la obra junto a los hijos de la pareja: Allison y Cristiano.
A Bolaños se le encendió de tal manera el espíritu navideño que le puso bonito al bailongo con un suéter a la medida de la ocasión. El pelo en el rompone estuvo en que se movía como si bailara un reguetón.