“Un premio para todo el grupo, toda la afición saprissista que tanto deseaba ese título 35. Nos llevamos todo: liderato, campeonato y goleo, fue un campeonato redondo para Saprissa”.
Es el resumen que hace Christian Bolaños, el goleador del Torneo Clausura con 18 pepinos.
No anotó en el segundo partido de la final de la segunda fase, pero no le importó porque su equipo ganó 1-0 y con eso confirmó el título, ya que en el Morera Soto, en la primera mejenga ganaron 2-0.
“Ya el goleo lo tenía, lo más importante era ganar el título, por eso cuando me quedó la bola en el área y me llegó a la zurda, mejor se la pasé al che (el argentino Mariano Torres) diciendo, ‘mejor hágalo usted y celebramos todos'”, describió el goleador.
Le encantó la forma de ganar la 35, venciendo en la serie semifinal 6-3 en el global a Cartaginés y en la final 3-0 a la Liga.
“Al equipo siempre lo dieron por menos, nunca nos vieron candidatos al título, eso nos motivó aún más”, dijo.
“Sabíamos que el partido sería complicado. La serie quedó liquidada en Alajuela (cuando ganaron 2-0).
“Ganar con el juego limpio, sin ensuciar la cancha sabe más, ese es un valor que les enseñas a los jóvenes. Las cosas se pueden ganar jugando bien y sin hacer trampa”, agregó.
Recordó que jamás tuvo en mente el goleo al principio de temporada, eso sí, estaba seguro que iba a pelearlo con todo.
“Fue gracias a mis compañeros, a la afición, al cuerpo técnico a Wálter (Centeno) que me encontró una posición para desarrollarme bien, me dio libertad y confianza”, reconoció.
El coronavirus convirtió el torneo en algo fuera de lo normal, con un parón de dos meses y partidos a estadio vacío.
“La diferencia es siempre respetar al rival y más aún cuando se tiene un contrincante que merece respeto”, aseguró.
Historia de un ganador
Christian Bolaños Navarro nació en Hatillo 8, el 17 de mayo de 1984. Está celebrando la estrella 35 del equipo de sus amores, porque fue con Saprissa que se formó y debutó en la primera división en el 2001, con tan solo 17 años.
Aquel debut fue en un partido en que Saprissa visitó al Municipal Osa, el 11 de diciembre del 2001.
El técnico que lo hizo debutar fue el argentino Patricio Hernández. Ingresó de cambio por Kervin Lacey a los 65 minutos. Fue debut con triunfo porque los morados ganaron ese partido 2-0.
En el fútbol nació con estrella porque con la camiseta morada, en aquella primera etapa (hasta el 2007), logró disfrutar tres títulos nacionales.
Es hijo de don José Manuel Bolaños y doña Miriam Navarro, tiene dos hermanos, Jonathan, quien también fue futbolista y jugó con Saprissa, Alajuelense y Cartaginés y José Pablo (q.d.D.g.). Doña Miriam, desde bien chiquillo, le dice Checho de cariño.
El primer título de su carrera lo ganó el 21 de diciembre del 2003, con Saprissa, al festejar la Copa Interclubes de la UNCAF, venciendo en la gran final 3-2 al Comunicaciones de Guatemala, en un partido que se jugó en el estadio Angeles Memorial Coliseum, en Estados Unidos.
Un año después, el 20 de mayo del 2004, le llegó su primera gran alegría en el fútbol tico, también con la camiseta morada, tras vencer Saprissa en la final nacional al Herediano.
En el 2005 fue parte del Saprissa que ganó la Copa de Campeones de la Concacaf y así se ganó el derecho de ir al Mundial de Clubes de la FIFA, en el cual el equipo de Tibás logró un histórico tercer lugar del mundo.
Bolaños recibió en ese Mundial de Clubes, el Balón de Bronce, como el tercer mejor jugador del torneo.
Fuera de nuestras fronteras jugó con el Odense B.K. de Dinamarca (firmó en el 2007), el I.K. Start de Noruega (firmó el 6 de noviembre del 2008), el F.C. Copenhague de Dinamarca (30 de agosto del 2010).
Volvió al fútbol tico en el 2014, cerrando negociación el 5 de setiembre con el Club Sport Cartaginés. Al año siguiente (2 de febrero) se fue para el Al-Gharafa S.C. de Quatar.
A Saprissa regresó en agosto del 2015 y ahí estuvo todo ese año. El 6 de enero del 2016 se confirmó su transferencia al Vancouver Whitecaps F.C. de la MLS de Estados Unidos. En ese fútbol debutó el 6 de marzo del 2016.
El 8 de enero del 2018 este morado de corazón regresó a Tibás, logrando en este 2020 una de las campañas más representativas de su historia con Saprissa al consagrarse campeón goleador con 18 pepinos.
Con Saprissa tiene seis títulos nacionales de Primera División, una Copa Interclubes de la UNCAF, una Copa de la Concacaf y una Liga de Concacaf. Ganó dos Superligas y una Copa en Dinamarca.
Con la camiseta roja de todos los ticos disputó, en categoría Sub-17, la Copa Mundo que fue en Trinidad y Tobago en el 2001, con la mayor, estuvo en Alemania 2006 y Brasil 2014 y Rusia 2018. Es el tico con más mundiales jugados.