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De la mano de ‘Cristiano’ Bolaños, Saprissa ya piensa en Thierry Henry

Morados mantuvieron ventaja en la cima ante Herediano y Alajuelense

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Con un Cristhian Bolaños inspirado y haciendo historia, Saprissa se deshizo con 3-1 de La U Universitarios, partido que sirvió como “preparación” para su duelo definitivo del próximo miércoles en la Concachampions.

Más de uno esperaba a un Monstruo cargado de suplentes, esas caras que apenas y pellizcan minutos en el once de Wálter Centeno pensando en partido ante el Montreal Impact en territorio canadiende por Concacaf.

Paté tiró otra idea y no tocó mucho su equipo, salieron casi las mismas caras de siempre que se ven partido a partido en la S, sin dejar a un segundo plano el torneo nacional por pensar en las copas internacionales como hizo otras veces.

El miércoles veremos si la decisión le representa algún riesgo o no a los morados, al jugar tres partidos en una semana y tener un viaje hasta Canadá de por medio, el cual realizará este lunes por la tarde.

¿Acaso no le aguantaba a la suplencia morada enfrentar en su propia casa al colero del torneo?, ¿No era una buena oportunidad para dar minutos a esos que Centeno tiene metidos en el cajón de los chunches?

Viendo el asunto desde otra perspectiva, Paté posiblemente notó que la U desde la llegada de Marvin Solano es otra, un equipo con toque, llegada y que viene en alzada, por lo que no se la habrá querido jugar.

En la primera jugada de peligro del partido a los dos minutos, la U mostró que llegó a la Cueva a jugar sin complejos, sin que le pesaran los 12 años que tiene sin ganar en esa cancha.

Yurguin Román tiró un gran centro al área, que lo pescó, Edder Nelson, la puso al centro y ahí entró para cerrar con tranquilidad Verny Scott. El volante bajó la pecosa en el punto penal y tocó al centro del marco para la sorpresa de todos.

Esos minutos, los celestes mostraron cuál era su plan, estar bien ubicados atrás, salir rápido y sorprender al Monstruo con velocidad, el plan arrancó a las mil maravillas, pero para su infortunio solo pudieron estar cinco minutos en ventaja.

Un remate de Michael Barrantes desde afuera del área no daba la impresión de llevar mucho, pero el pique de la pecosa se comió al meta Daniel Cambronero cuando intentó agarrarla, le pegó en el pecho y dejó el rechazo servido.

Allí en las afueras del área pequeña, con el olfato de un cazador veterano que sabe llegar inadvertido para meter la lanza, apareció Cristhian Bolaños para tocar sin problemas e igualar la mejenga.

‘Que bueno que Wálter no sentó a Bolaños’, ‘Es que Bola no se toca’, ‘los que saben siempre juegan’, dirá algún morado agradeciendo que su técnico entiende que en este Saprissa, el número dos, es una piedra angular con todo y sus 35 años.

Para la U, la torta de Cambronero cayó bastante pesada, porque el gol espabiló a su rival, que había entrado ruleado, pero conforme pasaron los minutos empezó a apretar hasta empezar a tocar la puerta del rival una y otra vez.

‘Qué salvada que Paté no sentó a Barrantes’, dirá otro fiebre cuando lo veía manejando los hilos del Monstruo ante la ausencia de Mariano Torres y Marvin Angulo de arranque, fue quien se echó la media al hombro.

El volante es otro que muestra ser de esas piezas vitales en la S y parece casi una locura que estén pensando para ofrecerle una renovación de contrato, porque son pocos los que le dan a los morados, lo que da Michael.

En la gran noche de Bolaños, el de Hatillo apareció de nuevo para marcar de penal al 33, luego de una dudosa falta de penal de José Eduardo Leiva sobre David Guzmán, quien sacó el penal más a maña que por una falta grave.

Keylor Herrera, árbitro del duelo le compró la acción al loco, para que Bola desde el manchón blanco pusiera el 2-1 en un remate que engañó a Cambronero.

¡Qué salvada que Paté no sentó a Aarón Cruz!, dijo otro fiebre cuando vio el mano a mano que el meta oriundo de San Carlos resolvió de manera brillante ante el paraguayo Pedro Báez.

Al guaraní le filtraron una pecosa en la que se fue solo corriendo hacía el meta y cuando entró por el centro del área, intentó cruzarla a la izquierda, pero el arquero morado metió un hombro de manera providencial.

Es cierto que Bola es el que ponía los goles, pero esa tapada que significaba el 2-2 a los 36, fue igual de vital siendo vitales y al 41 resolvió otro tiro que el sudamericano le hizo a la izquierda.

Llegó el triplete

Para el segundo tiempo el ímpetu que trajo la U por ir a igualar, se lo bajó el mismo que se lo apeó en el primer tiempo, “Cristiano” Bolaños como le dice más de un fiebre morado.

El volante firmó un momento histórico para él al marcar al 56 por tercera ocasión en el juego, algo que jamás había hecho en su carrera en 470 partidos como profesional, según el dato de su tocayo, Christian Sandoval.

Wálter Cortéz se armó un jugadón en la izquierda del área de la U, tocó a un lado de Cambronero, quien despejó el remate, pero otra vez la pecosa fue al goleador y Bola puso el 3-1 para ganarse el derecho de llevarse la pecosa para la choza.

Ya después de marcar historia, al 60, el nuevo ‘capocannoniere’ del Clausura 2020 con ocho goles, los mismos que el generaleño Keylor Soto podía decir adiós a la cancha en lugar de Marvin Angulo.

Para ese momento, ahora sí Paté ya tenía más derecho de pensar en el Impact, era solo cuidar un poco la ventaja ante un rival que no tenía fuerza para ponerlo en peligro y el asunto parecía liquidado.

Más bien, el asunto pudo terminar en goleada, sino hubiera sido por un tapadón de Daniel a Venegas al 67 y un cabezazo que Roy Miller falló solo en el centro del área al 68.

Ahora el Monstruo apunta a Titi Henry y compañía, donde también espera que los que aparecieron este sábado ante la U, aparezcan con más razón ante los canadienses.

Sergio Alvarado

Sergio Alvarado

Periodista de La Teja, especializado en deportes. Graduado de la Universidad Internacional de las Américas.

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