El nuevo logo de la Federación Costarricense de Fútbol generó todo tipo de comentarios en redes sociales. Unos critican su diseño, pero otros fueron más allá y afirmaron que el escudo lo puede hacer hasta un chiquito con el celu.

Para saber si es cierto que cualquier hijo de vecino puede darse a la tarea de confeccionar una nueva imagen para una marca, consultamos tres expertos en el tema, quienes coincidieron en que a nivel de diseño, el logo está bien hecho, pero que no es bonito estéticamente y que la principal falla es que el mal momento deportivo que pasa la Tricolor no se presta para un cambio de imagen.

El logo fue presentado el miércoles en la noche.

“Se están lavando la cara, porque muchos no querrán usar una prenda de la selección nacional a menos de que ocurra un milagro”. Antonio Jiménez, experto en mercadeo.

“Inspirados en nuestro escudo nacional, y siempre utilizando los colores de nuestra bandera, nace la nueva marca de nuestras selecciones y la Federación Costarricense de Fútbol.

“Los volcanes, característicos de nuestro escudo, se elevan en esta marca para resaltar que somos tierra de montañas, de bosques, de fuego y de gente valiente. Se crea una verticalidad sutil de la bandera y se agrega el borde dorado para elevar la imagen y el valor de los seleccionados que nos representarán en las canchas”, explicó la Fedefútbol.

Bien diseñado

La diseñadora gráfica Francela Zamora afirmó que personalmente ve feo el logo desde el punto de vista estético.

“Si se analiza en función del uso que se le pueda dar está bien hecho, porque es sencillo, se va a entender y se ve bien.

“El logo anterior era muy complicado de trabajarlo a nivel de diseño, pues tenía muchos elementos. Esta nueva versión se puede usar a un solo color y cuenta con pocos detalles” explicó.

“Siento que cuando se rediseña una marca muy posicionada es una suerte, o le va muy bien o muy mal. Todo el mundo conoce el antiguo logo, que está mal hecho, y este se ve sencillo, pero se adapta a las tendencias”, afirmó.

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La diseñadora agregó que otras marcas están buscando simplificar su imagen y es parte de lo que se está aplicando en el diseño.

El diseñador gráfico Luis Felipe Quesada manifestó que el logo está bien hecho en cuanto al concepto, pero el ambiente que gira en torno a la Sele provoca que no sea apreciado como tal.

“Lo que pasa es que en un país tan futbolero, en donde hay 5 millones de técnicos no les va a agradar.

“El logo se adapta a las nuevas tendencias y sigue lo que está pasando en algunos equipos de fútbol. A nivel regional el cambio más notorio es el de la selección de Estados Unidos, que antes era más agringado y ahora lo hicieron más sobrio y en Europa podemos ver el caso de la Juventus que cambió su imagen hace unos años”, comentó.

Quesada destacó la composición de las letras y el hecho de que la empresa que lo confeccionó se inspirara en el escudo nacional.

“Igual ha pasado con las camisas, a la gente no le gusta porque quiere ver otras cosas, más elementos futbolísticos, este logo tiene muy pocos elementos de fútbol”, dijo.

Mal momento

El experto en mercadeo Antonio Jiménez calificó el cambio de imagen de la Fedefútbol como un ridículo.

“Un logo tiene que evolucionar a lo largo del tiempo y se hace cuando hay un crecimiento de marca, de ventas, porque la gente busca el producto.

“Pero en el caso de la Sele el producto tiene problemas, lo que nos ofrece la selección es intangible, porque no sabemos cuáles serán los resultados y es hacer el ridículo cambiar un logo cuando lo primero son los resultados”, destacó.

Jiménez señaló que no es el momento para hacer un cambio de imagen, pues los resultados deportivos de la selección no son los mejores y la clasificación al Mundial de Catar está en veremos.

“¿Quién va a querer un producto si el equipo ha estado mal? En otras palabras se está vendiendo humo, se falló en mercadeo porque no se está cumpliendo al cliente, que son los aficionados, es desafortunado”, afirmó.

Luis Felipe está de acuerdo con Antonio y expresó que el ejemplo más claro se dio durante el Mundial de Brasil 2014, cuando la federación presentó las camisas y a los aficionados al inicio no le gustaron, pero conforme la Sele avanzaba en la Copa del Mundo las chemas se vendieron como pan caliente.