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El periodista de Deportes Repretel, Pablo Guzmán, le dijo sus verdades a Alajuelense con un editorial cargado de fuego.
Este lunes, durante el programa 120 minutos, que se transmite por Deportes Monumental y Canal 11, el comunicador sacó cinco minutos para hacer una serie de afirmaciones sobre el cuadro rojinegro.
En la primera parte de su mensaje, Guzmán destacó las fortalezas del cuadro morado para ganarle el duelo a los manudos, pero después desnudó a los erizos por la falta de carácter y la poca autocrítica.
“Cuando bajás los brazos de esa manera ya no te merecés nada. Saprissa sabe que este equipo es tan mental, le hace gol al cierre de la primera parte y lo deja como a un boxeador cuando está a punto del ‘knockout’.
“Y si le adicionás que la Liga falla el penal, que es otro golpe y rapidísimo le anotás el segundo gol en un momento determinante, luego del segundo gol la Liga se entregó a su suerte, la suerte fue que no le metieron más goles.
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“Mérito cien porciento del Saprissa, porque tiene un ADN diferente, es otra cosa, la Liga de nuevo baja los brazos, se van bravísimos con el aficionado”, afirmó.
Luego de unos minutos, Pablo, lejos de bajar la intensidad, más bien le dio con más fuerza a los rojinegros.
“Si de los últimos 15 clásicos, solo se ha ganado uno; no sos competencia para ese rival, aunque suena feo, para Saprissa dejaste de ser competencia desde hace rato.
“El aficionado de la Liga está cansado de escuchar a dirigentes, gerentes deportivos, decir que el CAR será más grande, que los jugadores comen mejor, que todo lo que tienen es mejor, cansado que las condiciones son las mejores para los jugadores.
“El aficionado alajuelense quiere ver a un dirigente que salga y golpee la mesa, luego de partidos como el de ayer, que no le tenga miedo a los jugadores, un dirigente que se sienta y diga, si es necesario despedir a dos o tres jugadores, para demostrarle a todos que se toman acciones, es lo que quieren ver.
“Los jugadores parecieran que son los dueños del equipo, hacen lo que quieren y no pasa nada, viven en una burbuja llamada centro de alto rendimiento, con las mejores condiciones del fútbol costarricense y a pesar de que pierden clásicos, pierden en cualquier instancia del torneo, no pasa nada y máxime cuando las excusas van dirigidas a situaciones diferentes, el arbitraje.
“Casi nadie de adentro se encarga de ponerle nombre a la crisis y la solución más rápida es la de quitar al entrenador. Los jugadores se acostumbraron a perder y aún así mantienen sus jugosos salarios y las condiciones son cada día mejores”, tiró con todo Guzmán.
