Cuando el Municipal Grecia ascendió a la primera división en Costa Rica, su técnico, Wálter Centeno, aseguró que su equipo no llegó a la máxima categoría para ser el pato de la fiesta ni para regresar de inmediato a la segunda categoría.
Centeno está cumpliendo su palabra y hasta tiene opciones de clasificar a su equipo, algo que lamentablemente no puede decir el Benevento, cuadro que ocupa la última posición del fútbol italiano y está rompiendo récords negativos en su primer año en la Serie A.
En nueve jornadas, el equipo ha perdido todos los partidos, por lo que rompió una marca que tenía 68 años en el Calcio (temporada 1949-1950) cuando el Venezia perdió sus ocho primeros partidos y empató ante el Palermo en la novena fecha.
Pero son tan malos, que si los medimos por puntos, el cuadro rojiamarillo es el peor equipo de Europa porque ningún otro club en el Viejo Continente tiene esas cifras de espanto.
El Benevento perdió contra Sampdoria (2-1); Bologna (1-0); Torino (1-0); Nápoles (6-0); Roma (4-0); Crotone (2-0); Inter (2-1); Hellas Verona (1-0) y el Fiorentina (3-0). Solo ha anotado dos goles y recibido 22 pepinos en contra.
Estas marcas de espanto le costaron el brete al técnico Marco Baroni, quien fue despedido este lunes y en su lugar contrataron a Roberto De Zerbi para ver si puede torcer el destino de un equipo que parece condenando a volver a la Serie B.
Las 'stregas' (brujas, en español) escribieron la historia en junio consiguiendo un ascenso increíble, ganando la final de Serie B contra el Carpi.
Una ciudad llena de pasión y de amor pudo celebrar el momento más importante de su historia deportiva después 88 años de su nacimiento, pero lo que empezó como un sueño se convirtió en pesadilla, ya que el equipo ha demostrado, al menos por el momento, que no estaba listo para este paso.
La primeras broncas para el club llegaron durante el mercado de fichajes, donde el cuadro 'campano' no pudo gastar el dinero para comprar jugadores de experiencia por lo que entraron a la pelea en clara desventaja.
Para colmo de males, su capitán, Fabio Lucioni, uno de los emblemas del club, dio positivo en un control antidopaje y se espera que le claven una larga suspensión.
El fin de la tormenta parece aún estar lejos para el equipo de la región de Campania, cuya ciudad más poblada es Nápoles, ya que en las próximas tres jornadas jugará ante el Cagliari (que acaba de cambiar de técnico), la Lazio y el campeón Juventus.
Los fiestones que se vivieron en la ciudad por el histórico ascenso, ahora se transformaron en desesperación, ya que mientras no sumen las marcas negativas seguirán engordando.