Este lunes, el Deportivo Saprissa informó la salida de Gustavo Chinchilla, quien ejercía como gerente general, desde el 2020.
A algunos, la noticia les tomó por sorpresa; sin embargo, hace unos meses, el ahora exgerente reconoció que estaba cansado.
En marzo, trascendió que Chinchilla podría dejar el club, noticia que se oficializó este 4 de agosto.
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El dirigente saprissista dio una conferencia de prensa el 28 de marzo pasado, para presentar al nuevo equipo de futsal del Saprissa, y confesó que estaba cansado, pero que seguía al pie del cañón en la institución.
“El 9 de marzo cumplí cinco años en Saprissa, entré al equipo tres días después de que se detectara el primer caso de covid-19 en el país, llegando a una industria que no conocía.
“Pasaron dos años, tuvimos que trabajar en el plan remedial del estadio Saprissa, casi un año al 50 por ciento de aficionados y tengo que confesar que estoy cansado”, afirmó en ese momento.
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Chinchilla confirmó que su gestión en el cuadro tibaseño no había sido fácil, pero se mantenía dando la pelea, sin ningún plan -afirmó en ese momento- de dejar el club.
“En Saprissa estamos bajo escrutinio, no solo de la junta directiva, sino de la afición del equipo más grande del país.
“No quería hacer mucho tema al respecto, pero nosotros mismos nos buscamos esto: la cuesta de enero ha sido durísima, arrancamos con un tema financiero, se vinieron otros temas administrativos, los resultados no son los esperados”, afirmó en marzo pasado.