Don Julio César “Pocho” Cortés nació en Uruguay, defendió los colores de su país en tres mundiales de fútbol (62, 66 y 70); sin embargo, su corazón también era costarricense, lamentablemente dejó de latir este jueves.
El exjugador falleció a los 84 años tras dar una dura y valiente lucha contra una enfermedad que lo afectó en sus últimos años, según nos confirmaron personas cercanas.
Cortés vivía en Costa Rica desde que llegó a Tiquicia en 1975 para jugar con la Asociación Deportiva Guanacasteca y entonces nos adoptó como su segunda patria.
Además de ser futbolista, también fue técnico de diversos equipos en el país como la ADG, Turrialba y Saprissa, a los morados los dirigió entre 1992 y 1993.
Para muchos no solo por el cartel que trajo, sino por su calidad, es uno de los mejores extranjeros en la historia del fútbol de Costa Rica, tanto que se quedó acá, formó familia y fue muy querido entre los aficionados.
El Pocho llegó a Tiquicia a jugar con los pamperos con 35 años, al cierre de su carrera, gracias al extécnico uruguayo Orlando de León, fallecido también desde el 2015.
En La Teja reconocemos el legado del Pocho al fútbol nacional y le mandamos nuestro más sentido pésame a su familia, hermanos e hijos en el país.