Los futbolistas y entrenadores que cumplieron o están próximos a celebrar un año más de vida durante marzo han sido y serán los primeros en hacer cambios de planes al momento de festejar una nueva vuelta al sol.

Decimos esto porque la emergencia mundial por el coronavirus ha provocado que millones de personas en el mundo eviten el contacto con otras, sin importar si son familiares.

Este mes, muchos dejaron de lado una fiestica y prefirieron no recibir abrazos para no ser una víctima más del virus.

Uno de los que estuvo de manteles largos este viernes 27 de marzo fue Marvin Solano, técnico de La U Universitarios, quien llegó a las 64 vueltas. Confesó que la pasó encerrado en su casa junto a su familia.

“Ahora más que nunca hay que tener cuidado, seguramente me harán un queque y una comida, pero será algo con mi familia”, comentó.

Pero este no es el primer cumple extraño de Solano, el profe recordó que en el 2014 en el día de su natalicio Jafet Soto lo despidió como entrenador del Herediano.

“Son cosas curiosas que pasan en esto del fútbol, ese día me hicieron una fiesta sorpresa y luego me llevé la sorpresa de que ya no era más el entrenador de Heredia”, recordó.

Cumple por dos

El estratega Juan Diego Quesada Samuels, quien dirigió en cuatro mundiales menores a selecciones ticas, tanto masculinas como femeninas, aseguró que este año será uno de sus cumpleaños más raros, pues lo tendrá que festejar con poquitas personas.

Según nos contó el exitoso técnico, una particularidad que tiene es que su hijo Ignacio Quesada y él cumplen el 31 de marzo. El técnico celebrará 59 años mientras que su retoño 27.

“Vamos a estar en la casa tranquilos, casi siempre hacemos una fiesta e invitamos a más personas, pero esta vez no porque hay que cuidarse. En la casa vivimos mi esposa y dos hijos más, entonces lo que haremos es comprar un queque y hacer una comida y también vamos a celebrar el nacimiento de mi nieta que fue este lunes”, contó.

Este extraño momento le hizo recordar cuando hace 27 años, estando en Checoslovaquia, recibió la noticia de que Ignacio, su hijo, había nacido.

“Ese fue el cumple más extraño de mi vida, estaba a miles de kilómetros de mi familia, me sentía feliz, pero también impotente. A mi hijo lo conocí como un mes después de nacido que fue cuando regresé”, comentó.

En familia

El volante Diego Madrigal, quien milita en la Asociación Deportiva San Carlos, cumplió 31 años el 19 de marzo anterior y aseguró que fue una celebración diferente a la de años anteriores.

Según contó, hizo algo pequeño con su familia cercana para prevenir algún contagio.

“Soy casero, pero igual me gusta celebrar los cumpleaños, en este caso hicimos algo pequeño. Fue un cumpleaños diferente por todo y porque también festejé la llegada de mi segundo hijo que se llama Emiliano y que ahorita cumple un mes de nacido”, detalló.

El habilidoso jugador reconoció que en este cumple prefirió driblar al virus y compartir con menos personas.

“Me hicieron una comida y un queque, fue algo más tranquilo de lo que estoy acostumbrado, pero igual la pasé muy bien junto a mi familia”, añadió.

Otro que estará próximo a festejar es el defensor de La U Universitarios Esteban Marín, quien el 31 de marzo llegará a las 24 vueltas al sol.

Para él, este festejo cambiará completamente, pues casi siempre hace algo grande junto a sus padres que son adultos mayores.

“Mis papás tienen factores de riesgo, entonces eso me hace pensar en no hacer nada. En todo este tiempo no ha llegado gente a mi casa para evitar un contagio hacia ellos”, explicó que zaguero.

Aunque para él es doloroso, entiende que lo más importante es tratar de defenderse del virus, así como él lo hace desde su posición como defensor.

“Generalmente mi familia o mi novia me hacen una fiesta, siempre se ha celebrado así, ahora no se va a poder y además que no hay mucho que hacer. Obviamente siempre es bonito celebrarlo, pero en este momento es mejor no hacer nada y agradecerle a Dios, no solo por un día en específico sino por todos”, añadió.

Por su parte, el ministro de Deportes, Hernán Solano, llegó a los 53 años el jueves 26 de este mes. Festejó con pocas personas, a diferencia del 2019 cuando se lo celebraron en la Federación Costarricense de Fútbol.

“Voy a pasar el día con mi esposa Ingrid Obando, no sé si me tendrá un queque u otra sorpresa. Este es el primer año que me toca una cosa así y creo que a toda nuestra generación, entonces me parece que es más importante quedarse tranquilo en la casa para evitar que esto se propague”, añadió.