EscucharLa temporada de limones se acabó en Tibás. Saprissa partió a Limón en cuatro y le sacó las últimas gotas que le quedaban al cuadro de Horacio Esquivel este Verano.
El Monstruo calentó, con la goleada 4 a 1, la mejenga del miércoles (8 p. m.) ante Herediano, pues ahí en el Rosabal Cordero se jugará la vida y podría definirse, de una vez por todas, que haya final ya sea contra los rojiamarillos o contra el Santos que aún da los últimos aleteos, o bien los morados podrían dejar para la última fecha la definición de esta segunda fase.
Estuvo muy bonito el sabor que le aportó la "Tromba" al torneo, pero a pesar de que prometía dar guerra abriendo la cuadrangular con una soberana paliza al Monstruo 5-1 en el Juan Gobán, parece que ahí lo dio todo y no aguantó el ritmo de la cuadrangular. Será hasta la próxima, porque ya quedó eliminado.
En la "Cueva" los pupilos de Horacio ni el arranque aguantaron pues en 21 minutos ya tenían en el saco tres remolachas.
El equipo de Carlos Watson tenía claro que golear a la Tromba iba a ser clave, primero para sacarse el clavo de la goleada (5-1) en el Juan Gobán y segundo para sacudirse el gol negativo que, a como están las cosas, podría definir quien gana la cuadrangular.
Por eso desde el minuto dos ya estaban los morados encima de Dexter Lewis con un jugadón de Daniel Colíndres que no pudo definir Fabrizio Ronchetti.
La salvada fue que el uruguayo, tan solo dos minutos después, tuvo el desquite cuando aprovechó que la defensa de Limón se durmió. Tal vez por la lluviecita que caía se antojaron de una acurrucada, y tras un centro de Marvin Angulo al corazón del área y a media altura, Ronchetti desvió con pierna derecha y coló el primero.
Este era el cuarto gol del campeonato para Ronchetti. Ya extrañaban los saprissistas los pepinos del charrúa pues su última anotación había sido el 13 abril contra Pérez Zeledón.
Los caribeños tuvieron para empatar al minuto 9 pero el goleador Erick Scott no aprovechó una pifia de Jordan Smith, y pateó más torcido que raya de borracho.
Cuando el reloj marcaba el minuto doce el central Adrián Chinchilla vio que Jeikol Peterkin jalaba a Fabrizio y pitó penal; algo drástico pero el daño estaba hecho.
Fue el mismo Ronchetti el que agarró la pecosa para cobrar. Tal vez ardido por los rumores que lo ponen fuera del Monstruo en el Invierno y lo colocan en el Team tenía más ganas de anotar, y con remate rastrero al centro firmó su doblete y el dos por cero a favor del Saprissa.
El partido solo tenía un color, moraditico, y tenía tintes de goleada exagerada porque apenas el 21 cayó el tres por cero por intermedio de Colindres.
Fue un golazo de Daniel que aprovechó que nadie lo marcó y pudo hacer lo que le dio la gana, hasta que llegó frente al área y decidió tirar, pegadita al palo derecho de Dexter.
Limón F.C solo tuvo una buena en la primera parte, fue una gran jugada de pared entre Steven Williams y Scott pero Dany Carvajal achicó justo a tiempo.
Árbitro fatal
En el segundo tiempo las cosas pudieron ponerse complicadas para el Sapri pero Adrián Chinchilla se ruleó en jugadas claves para la Tromba.
Sí Chinchilla le pitó penal a Ronchetti, nadie se explica como no sancionó al minuto 47 el jalonazo de Jeikel Medina a Scott justo en sus narices. Lástima porque hubiese sido un gran aliciente para los caribeños.
Después la marca de Limón volvió a flaquear y cayó el cuarto para los locales cuando Julio Cascante se fue al ataque en un tiro de esquina y con mucha facilidad cabeceó dentro del área para vencer a Lewis.
Sin mucha emoción avanzó el juego hasta que el minuto 79. Los limonenses se acordaron de jugar, tocaron y tocaron hasta que el balón llegó a los pies de Yuaycell Wright que se barrió y de media vuelta pateó cruzado para vencer a Carvajal que nada pudo hacer.
El golcito no servía de nada para Limón pero sí hizo mucho daño al Sapri porque no pudo salir con el gol diferencia positivo, y quedó con un -1 en la tabla de la cuadrangular y es tercero detrás del Santos que tiene los mismos cinco puntos pero un gol diferencia de +2.
Para cerrar con broche de oro un arbitraje cargado de errores, Adrián Chinchilla le anuló un gol legítimo a Limón por razones que solo él sabrá y de esa forma tapó una torta más del portero Carvajal.
Resulta que Carvajal al sacar de puerta le pegó la bola en la espalda a Steven Williams, y se metió enl marco. Williams nunca intentó estorbarle al morado, pero Chinchilla más bien pitó falta de los visitantes.
También solo Chinchilla sabrá por qué no hubo expulsados, ya que por lo menos un jugador de cada lado se merecía la roja.
De esta forma Limón regresó a casa sin nada y con el reto de tratar de recuperar su prestigio en los dos juegos que le faltan, mientras Carlos Watson y compañía se alistarán para jugarse la vida en el Rosabal Cordero.
