EscucharHerediano sigue montado en la nube de la felicidad y este domingo sufrió más de la cuenta para derrotar a Guanacasteca 2 a 1, con un penal de último minuto y lleno de polémica.
El gol provino de un tiro libre que tardó como tres minutos en ejecutarse y que cuando la bola iba a salir, aparentemente, Yeison Molina tocó con la mano en la raya y dentro del área.
La polémica surge porque de haber mano, fue accidental, pues el defensa se cayó y pudo ser fuera del área, además, el tiempo adicional que dio el árbitro David Gómez es cuestionable.
Según nuestro analista arbitral, Henry Bejarano jamás fue mano.
El penal lo cobró Everardo Rubio y lo cambió por gol. El juego terminó caliente, con reclamos de los guanacastecos.
Los goles fueron de Greivin Méndez para la ADG y de Francisco Rodríguez y Rubio para Herediano.
Pero el arbitraje fue malo por parejo, porque al minuto 63 le anularon un gol legítimo a Gerson Torres, quien mandó a guardar una pelota que pegó en el palo luego de un remate de Elías Aguilar.
Ambientazo
La mejenga inició en un marco era espléndido, gradas llenas, coloridas, sonrientes. Los heredianos colmaron el estadio Carlos Alvarado, respondiendo a la remontada histórica del equipo en México, donde eliminó al Toluca, luego de levantarse de un 4 a 1 en el marcador global de la serie, con el que terminó el primer tiempo y que terminó 4-4.
Todo era fiesta rojiamarilla, las sensaciones para los florenses eran buenas antes del partido. El presidente del Fuerza Herediano, Jafet Soto, hasta se arrolló las mangas para sacar agua del estadio con una escoba pues se vino un baldazo horas antes del partido.
Aquil Alí hasta dio declaraciones muerto de risa por el empate en el clásico entre Saprissa y Alajuelense, pues los beneficiaba. Era un jolgorio.
Por si fuera poco, los resultados perfectos se terminaron de redondear el domingo en la mañana con la inesperada derrota del Cartaginés contra Liberia en el Fello Meza. Pintaba desde temprano para que fuera un fin de semana perfecto para los florenses.
El triunfo del Team lo alejaría tres puntos de Alajuelense y con un partido menos, un panorama ideal pero enfrente estaba Guanacasteca, el equipo que siempre le hace la vida imposible.
El juego fue muy dinámico porque los dirigidos por Horacio Esquivel nunca se achicopalaron. Siempre fueron al frente con valentía, sin miedo, con respeto al rival, pero con los tres puntos entre ceja y ceja.
Así, el juego fue bueno, quizás sin tanta profundidad, quizás sin tanta emoción bajo los marcos, pero sí de un ida y vuelta constante y muchas aproximaciones.
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Por ejemplo, Ronaldo Araya ensayó un remate fuera del área al 9, que pasó cerca del horizontal y el “Divino” Rodríguez casi sorprende con un taco al portero Antony Monreal, en una jugada colectiva a lo Team.
Y ni que decir del minuto 31, cuando Andy Rojas, de gran nivel, se fue por la derecha, se la pasó a Elías Aguilar y este a Araya, quien remató fuerte y a marco, pero Monreal negó el gol. Tapadón.
Guanacasteca llegaba con velocidad por las bandas y se fue arriba en el marcador con un gol al 42. En un saque de banda largo, la bola llegó a Marco Granados, quien la puso al centro de taco. Hubo un rechazo herediano y la pelota cayó en Josimar Olivero, quien le dio con todo, pero la bola pegó en la espalda de su compañero Greivin Méndez y el balón quedó suelto. Méndez se avispó y metió un cañonazo a quemarropa.
El Team, azuzado por la remontada en México empezó a remar contracorriente, en busca de otro triunfo de la misma forma.
Al 54 lograron empatar, luego de una serie de rebotes en el área chorotega. Getsel Montes fue a disputar arriba con Yeison Molina y ganó el guanacasteco, pero dejó el rebote muy corto, donde estaba el Divino Rodríguez quien anotó por tercer partido consecutivo (Cartaginés, Toluca y Guanacasteca).
Con el 1 a 1, las aguas de la tensión bajaron, pero el entusiasmo no fue el mismo en las gradas. La ADG no estaba para ser el pato de la fiesta y el aficionado respetó eso.
Sobre el cierre, los chorotegas lograron encimar y generaron algunas ocasiones de peligro en el marco de Aarón Cruz, como un remate de tiro libre de Yeison Molina que obligó a Cruz a desviar al córner.
En el último minuto llegó el penal polémico en tiempo de reposición y la felicidad volvió a invadir a todos los heredianos.
