Iñaki Alonso, técnico morado, cree que el Team ganó el primer partido de la final sin “jugar al fútbol”.
“No me sorprendió nada, sabíamos que Heredia haría una línea de 5, sabíamos el tipo de partido que nos plantearía.
“Por momentos ellos lo han hecho bien, lo que querían hacer, fue una “master class” (clase maestra) de no jugar al fútbol. A partir de ahí nuestro equipo trató de crecer, siendo dominador, pero nos faltó llegar al área con precisión.
“Sabíamos que teníamos que tener paciencia, hacer circular espacios, sabíamos que teníamos que llegar, algunas veces llegamos y otras no”, afirmó.
Más allá del resultado, Alonso es optimista y apelará a la historia y al ADN saprissista para intentar conquistar el bicampeonato.
“Vamos a apelar a una frase que es historia: no se repartan nada. Estamos vivos, es un partido en el que nosotros conocemos al rival, el contexto y sabemos qué tipo de partido vamos a tener. Las finales está claro que se ganan y nos quedan 90 minutos todavía y, por como percibo al equipo, soy optimista”, dijo.
Una gran deuda
El español sabe que al Sapri le ha costado ganar de visita en el presente torneo y manifestó que le toca a él eliminar eso.
“Es algo que puede ser como un virus que está ahí, lo que hay que hacer es extirparlo y eliminarlo y qué mejor oportunidad que este domingo, que es la final.
“El marco es precioso, tenemos que demotrarnos y demostrar a Costa Rica que somos un equipo que tratará de ganar la final”, expresó.
Alonso, además, se refirió a las lesiones del volante Mariano Torres y del delantero Carlos Villegas.
“Sobre Mariano y Carlos es el día a día, hay sensaciones, los controles que hacemos a nivel de ultrasonidos y ahí nos dan las opciones de que estén. Si los jugadores no están al 100% en un partido como hoy, es complicado”, explicó.