Dos zapatazos espectaculares de Jefferson Brenes le permitieron marcar dos golazos en la semifinal entre el Herediano y el Saprissa, que lo convirtieron en la gran figura del conjunto florense.
En el partido de ida sacó un formidable remate fuera del área para poner el 2-0, mientras que este domingo, el habilidoso volante abrió el marcador a los 27 minutos con otro bombazo desde fuera del área.
Con un remate preciso y precioso al ángulo que cuidaba el meta Aarón Cruz, el siquirreño se llevó las palmas y demostró su mejor nivel en los momentos indicados.
“Recibimos un golpe muy duro contra el Real Estelí, eso nos hizo cambiar y nos dio las ganas de ir a pelear por el campeonato.
“Sabemos que esto se juega con todo, ya no se trata de quién fue mejor, porque una final las gana el que las mete, de eso se trata todo”, comentó Jefferson.
El volante rojiamarillo suma casi mil minutos en este torneo en 14 partidos disputados con dos pepinos, los cuales marcó en el momento más importante para su equipo.
“No la vi por dónde entró, cuando vi que Aarón se tiró simplemente corrí porque le pegué bien. Me siento muy contento por la anotación y me voy a casa a descansar”, explicó.
Además de los goles, en el medio campo se convirtió en el eje del cuadro florense, ya que le dio equilibrio e hizo olvidar a los fiebres florenses los nombres de peso que suelen jugar en ese puesto.
El viernes pasado en entrevista con La Teja, el jugador comentó que su familia ha sido su principal inspiración este torneo.
Brenes dedicó el pepino que marcó este domingo a sus familiares. “Quiero dedicarle el gol a mi familia e hija, a mi familia allá en Siquirres que siempre están pendientes de mí y que me apoyan mucho”, dijo.