La segunda fecha del Festival Trailero convocó a más de 2.000 personas este domingo, en el Circuito Grupo Sur, en Parque Viva, entre las que estaba alguien muy especial.
Se trató de Yeedy Vega, un joven de 15 años que padece parálisis cerebral, y quien viajó desde Pérez Zeledón junto a su familia con un solo propósito: disfrutar del tradicional pique de tráileres.
Esta historia resultaría común si no fuera por el hecho de que Yeedy tenía un lugar privilegiado para ver la competencia: un cabezal elaborado a base de madera de pino y material reciclado, pintado de color azul, su tono favorito, y hecho por su padre, Enrique Vega, quien no dudó en pasar largas horas de la noche las últimas semanas, cumpliendo el sueño de su hijo.
“Esta es la segunda vez que venimos al Festival Trailero y hacemos este esfuerzo por Yeddy, quien desde niño siempre demostró ser un apasionado de los cabezales y disfruta muchísimo de esta actividad. Sentimos que es cumplir un sueño para él y lo hacemos desde el momento en el que decidimos el diseño del carro, escoge el color, lo construimos, entre otras cosas”, expresó Enrique, mientras un par de niños se acercaba al cabezal que él había construido con sus propias manos.
Según dijo, el carro no estaba terminado, pues esperaban poder ponerle luces y una mejor mufla, pero el tiempo y dinero no dio para tanto. Aún así, el ver sonreír a su hijo hizo que todo esfuerzo valiera la pena, ya que es la actividad que más espera en el año.
“Actualmente, estamos pasando por una situación económica y familiar muy compleja. Hace tres meses mi esposa, Yeedy, mi hija de tres meses, Sunny, y yo, sufrimos un accidente de tránsito muy fuerte. Realmente estamos vivos de milagro, así que necesitamos de la ayuda de muchos para poder recuperarnos, pues mi esposa aún está convaleciente”, afirmó el señor con lágrimas en los ojos.
Para Vega, el asistir al Festival Trailero, en esta oportunidad junto a sus padres, Josué Vega, de 82 años, y Haydee Arroyo, de 72, es un regalo que la vida le dio también.
Los abuelos de Yeedy decidieron que esta era el momento ideal de compartir el sueño de su nieto.
“Si usted viera cómo se pone cuando pasa algún cabezal. Realmente es una emoción indescriptible, por lo que estar aquí, junto a él, es algo que nos llena de muchísimo orgullo. Este día no solo será inolvidable para Yeedy, sino también para nosotros, porque su existencia nos alimenta el alma”, aseguró Arroyo.
Don Enrique considera que en la próxima fecha el cabezal de Yeedy ya estará terminado, tal cual ellos lo han soñado: con luces, mejor mufla, las llantas que le den una mayor estabilidad, entre otros pequeños detalles.
“Esperamos que, al igual que en fechas anteriores, Parque Viva nos siga extendiendo la invitación para que mi hijo pueda disfrutar de esta experiencia, en un lugar muy seguro y que le permite circular por todas las zonas. Esto nos inspira a tener el cabezal bterminado en la siguiente fecha”, comentó Vega.
Nadie puede con ella
El camionzote ganador este domingo en la categoría libre volvió a ser la María Seca, de Geovanny Quesada, al obtener el primer lugar por segunda jornada consecutiva este año, con un tiempo de 13.66 segundos.