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Joven de 20 años destaca gracias a su Corollita modelo 73

Estudiante de Psicología tiene su chuzo muy bien chineado

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Cristian Daniel Garro Porras es un joven de 20 años que tiene un gusto especial por los carros clásicos, le encantan los carritos con bastante recorrido como el Toyota Corolla modelo 1973 que tiene.

Con su propio esfuerzo, ganando platica en el taller mecánico de su papá, Cristian ahorró para conseguir este chuzo que le llegó al corazón casi desde que lo vio y con el cual que anda por todo lado.

Para lucirlo, él siempre lo anda impecable, tanto por fuera como por dentro lo que le vale los elogios, la admiración y las preguntas de personas de todas las edades.

“Yo le había negociado a mi papá un carro que el tenía, del que yo me encargaba, un día andaba en la calle y me lo encontré ahí, en media calle, así como botado, guardado, sin que le dieran uso. A mí siempre me han gustado mucho los carros viejos, más los corollitas y me llamó la atención.

“Me fui a hablar con el dueño y me dijo que quería venderlo o cambiarlo y le ofrecí el que teníamos y él aceptó. Lo negociamos y me lo traje en grúa al local de mi padre hace como dos años, ahí le fui metiendo piezas poco a poco, porque en realidad acá no hay nada para este carro”, comentó.

El asunto no era la parte mecánica, el carro debía como once marchamos, pero por una condonación que hicieron para esta clase de casos, solo pagó una placa y la inscripción, por lo que se ahorró unos ¢600 mil y así se pudo mandar a andarlo en la calle.

“Cuando ya lo puse al día lo he andando en casi todo el país, Guanacaste, Puntarenas, Limón, es un carro en el que ando muy confiado porque siempre arranca y nunca me falla. Como yo lo ha armado y le ha hecho todo mecánicamente sé cómo anda”, destacó.

A él lo que le encanta es manejarlo por donde pueda, no es de esos que tiene un carro para tenerlo guardado en el garaje, por eso va al brete, a la U, a hacer mandados o a pasear con el chuzo.

“Es todo vacilón porque a cualquier lado que vaya la gente me dice que qué lindo carro o que es un chuzo de corollita, me pregunta de qué año es. La gente mayor me dice que la familia tuvo uno o que cuando estaba en el cole andaba en uno parecido y eso es muy tuanis.

“La gente, además, me pregunta cómo a un muchacho tan joven le va a gustar un carro tan viejo y cómo hago para tenerlo tan cuidado. Hay muchos que modifican mucho el modelo de la época y yo intento mantenerlo lo más original posible, me gusta mucho ese estilo vintage, seguir esas líneas”, agregó.

Por este gusto por los clásicos, tiene muchas amistades un poco mayores que él, pues no a todos los jóvenes les gusta este estilo, gente con la que también ha aprendido mucho sobre los clásicos.

“Conozco señores que se sorprenden que a mi edad me gustan mucho estos carros y me ayudan hasta con piezas que me dan de carros que tuvieron hace tiempo, por lo que cuando encuentran piezas me llaman y me las regalan”.

“A mí ya me invitan a eventos de carros viejos y cosas así, entonces conozco a mucha gente que me va ayudando para ir montando el carro cuando necesito piezas. En los eventos suelo ser el menor, porque la mayoría de gente que van son señores con hijos, yo solo soy el corollita verde”.

Todavía le quedan más cosas por hacerle, necesita algunos stickers y postales originales para darle aún más esa nota clásica, pero mientras tanto, este fiebre sigue disfrutando mucho de una pasión que no conoce de edades ni generaciones.

Sergio Alvarado

Sergio Alvarado

Periodista de La Teja, especializado en deportes. Graduado de la Universidad Internacional de las Américas.

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