Deportes

La otra cara del nuevo goleador de Alajuelense

Jonathan Moya ha debido pulsearla duro para ser futbolista

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Moya, tercero de izquierda a derecha, será jugador manudo por dos años. Fotografía: Shirley Vásquez, corresponsal ( )

Alajuelense hizo oficial este miércoles el rumor que corría desde hace más de dos meses y confirmó a Jonathan Moya como su delantero para los próximos dos años.

Moya se convirtió en el jugador número 65 que ha jugado con Saprissa y lo hará también con Alajuelense, así como el futbolista veintitrés que pasa directamente de la casa morada a la manuda, según datos del estadígrafo Christian Sandoval.

La llegada de Moya al fútbol, donde ya militó con Uruguay de Coronado y fue campeón con Saprissa el domingo pasado, no ha sido nada fácil.

De hecho, sus papás hacían un viaje desde Monteverde, donde vivía, para llevarlo a entrenar a Puntarenas.

En una entrevista con La Teja , en el año 2015, don Luis Moya, papá del ojiverde, contó que hacían tres viajes por semana para que el único varón, de tres hijos, pudiera dar sus primeros pasos en el fútbol.

En los viajes gastaban unos ¢20.000 por día, ya que le pagaban a un conocido para que los llevara.

Ese esfuerzo se vio recompensado cuando su hijo fue fichado por Saprissa a los 15 años.

“Estamos acostumbrados a viajar, el bus dura como cuatro horas, pero eso no importa y lo que le pedimos a Dios es salud para poder seguir acompañándolo”, dijo “Moya”, como le dicen al papá, en esa ocasión para explicar cómo hacían para ir hasta Coronado, donde jugaba Jonathan, y apoyar a su muchacho.

Doña Damaris Aguilar es la mamá del nuevo rojinegro, quien está casado con Andreína Rosales y es papá de un niño llamado Julián, de año y medio.

Está joven
26 años cumplió Moya en enero de este año.

Apodado "Pisillo" en Monteverde, aunque Jonathan dice no saber la razón, llega ahora con la meta de ganarse la titularidad en un cuadro manudo que entregó la responsabilidad de anotar, en el campeonato recién terminado, a los jugadores Jonathan McDonald y al hondureño Róger Rojas.

Jonathan Moya ganó su primer campeonato con Saprissa el domingo anterior. Fotografía José Cordero (Jose Cordero)
En el 2014, Moya jugaba con el Uruguay de Coronado. Archivo /Alexánder Otárola. (Alexander OTAROLA)

Antes de casarse, Moya vivía en Alajuela con su mamá, una hermana y dos sobrinitos. Ahora tiene su domicilio electoral en Barva de Heredia, lugar cercano para viajar a diario ahora al estadio Alejandro Morera Soto.

Antes de tener las comodidades que hoy le da el fútbol, Moya nos había contado , en abril del 2014, que había vendido el carro que tenía en ese momento para pagar unas deudas y ahorrar, por lo que debía levantarse las 5:30 a. m. y agarrar bus para llegar a los entrenamientos, en Coronado, a las 8:30 a. m.

En el regreso a la Ciudad de los Mangos se llevaba unas dos horas y media de viaje en bus, cosa que ahora cambió.

Jonathan, quien se considera tímido, siempre que un medio le pedía una reacción , la daba con gusto.

Cuando no estaba entrenando, le gusta ver películas de comedia o terror, jugar playstation y pasar tiempo con quien era su novia y ahora es su señora, la médica en farmacia Andreína Rosales.

Entre otras de sus curiosidades, Jonathan se declaró admirador de Cristiano Ronaldo, aunque es seguidor del Barcelona.

Karol Espinoza

Bachiller en periodismo y licenciada en Comunicación de Mercadeo. Periodista de Deportes con más de 14 años de experiencia. Integra La Teja desde setiembre del 2006.

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