El exárbitro mexicano Edgardo Codesal ha denunciado en redes sociales que ha recibido deseos de que muera por COVID-19, junto a sus hijos y nietos para verlo sufrir, por decir en una entrevista que se publicó en Argentina que Diego Armando Maradona era una “persona despreciable”.
Codesal, pitó la final del Mundial de Italia 1990 en la que Alemania venció a Argentina después de que marcara un penal polémico, ganándose el odio del pueblo argentino e insultos de varios jugadores de la selección Albiceleste, entre ellos Maradona.
El réferi publicó en Twitter los insultos recibidos a los que afirma estar “acostumbrado”, pero no por eso dejan de ser graves y molestos afirma.
“Ante la ola de comentarios, insultos de deseos de que se mueran mis hijos y mis nietos de COVID-19 y así verme sufrir, porque dije que para mí Maradona es despreciable y no digno de aprecio ni estima, lo sostengo. Para mí no lo es y ya: ¡Dije que como jugador fue un crack! pero como persona es despreciable, una de las peores personas que conocí en mi vida”, destacó el silbatero ante la nueva oleada de insultos.
Como persona es despreciable!
— Edgardo Codesal (@EdgardoCodesal) April 26, 2020
El árbitro nacido en Uruguay, pero naturalizado mexicano, agregó: “No puedo tener aprecio a alguien que me ha insultado durante 30 años. ¡Es mi opinión, aunque no les guste!”.
Además de la falta de penal, que el propio cobrador alemán, Andreas Brehmen reconoció años después en una entrevista que fue un fallo discutible y muy rigoroso, Codesal expulsó a dos jugadores argentinos, Pedro Monzón y Gustavo Dessoti, detalles que no le perdonan los sudamericanos.
Maradona ha llamado al azteca ladrón y alguien a quien no consigue perdonar en diversas entrevistas.
“Es un ladrón que me causó mucho dolor, lloré mucho por él”, ha comentado Maradona.