“Atajalo y te convertís en héroe”, fue la frase que Neymar se acercó a decirle a Keylor Navas antitos de que el arquero tapara el penal que le diera el título de la copa de la Liga al PSG este viernes ante el Olympique Lyon.

Aquel fue más un consejo entre amigos que de compañeros, una relación que con el pasar de los meses se ha vuelto más que evidente entre ambos futbolistas.

Al cumplir su primer año en Francia, el costarricense parece haber encontrado en la máxima estrella del club a su principal aliado, tal como sucedía con Cristiano Ronaldo, Marcelo y Sergio Ramos en el Real Madrid.

Muchos hasta aseguran que el tinte rubio que se aplicó Navas en el pelo fue influenciado por el estilo extravagante que suele utilizar Neymar, quien a cada rato se inventa loqueras en el pelo.

El vacilón en redes sociales, los múltiples retos en tik tok y los videos en los que se les ve pasándola puras tejas es uno de los tantos puntos en común que parecen haber encontrando.

La notoria y creciente amistad entre ambos quedó clara para las 139 millones de personas que siguen al brasileño en sus redes sociales, una cuenta en la que ya se volvió habitual ver a Keylor, así como para los casi once millones de seguidores del arquero, también es común toparse al delantero entre las historias.

La última cucharada de miel entre ambos la realizó el sudamericano este viernes, justo después del encuentro ante el Lyon.

“Qué grandes eres hermano, mucho respeto por ti”, es el texto que escribió Neymar en una fotografía en la que sale abrazando a Keylor.

La influencia de Navas en el cuadro parisino está creciendo de tal forma que en una foto de la celebración VIP aparecieron otros dos costarricenses, Cristian Gamboa y Óscar Duarte, quienes viajaron a París a ver jugar a su compatriota.

Llamativo a los medios

La buena vibra entre ambos jugadores tampoco pasó desapercibida para medios de España, Estados Unidos y Brasil.

Algunas páginas afirman que el tico hasta llegó a mejorar el ambiente general en el camerino, del cual se habían escrito muchas cosas tiempo atrás.

“Keylor Navas llegó al París Saint Germain cuando parecía que el vestidor estaba roto por los diversos problemas que aquejaron al equipo durante el mercado de verano, en el que Neymar pretendía salir del club hacia el FC Barcelona, pero el equipo blaugrana no pudo llegar a un acuerdo con el cuadro parisino, que se aferró a conservar al atacante brasileño.

“Ahora, más de medio año después de esto y de que el tico se incorporara al PSG, el cuadro francés parece estar muy unido, pues es común verlos conviviendo juntos. Además, su desempeño en el campo de juego es mucho más efectivo”, dice una nota del diario As de hace dos meses.

Antes de la mejenga de este viernes, sitios como As, ESPN y Marca destacaron la manera que ambos jugadores emplearon para bajar el estrés con un reto de malabarismo.

“El delantero brasileño retó a Keylor a un duelo de habilidades para demostrar quién era mejor. El video fue subido a la cuenta de TikTok de Neymar y en él se muestra cómo gana la batalla frente al costarricense, luego de lucirse con malabares de otro planeta”, detalló As.

“Es un jugador de otro nivel, de otro mundo”, mencionó Keylor Navas al Medio oficial del PSG, sobre Neymar Jr. y la importancia del astro brasileño dentro del camerino.

Viejos conocidos

La amistad y el respeto de una figura como el astro brasileño tampoco se ganan de gratis y al parecer esa admiración arrancó desde que eran rivales en el fútbol español.

Ambos jugadores se conocieron cuando Navas firmó por el Real Madrid en el 2014, un año antes, Neymar había llegado al Barcelona entre muchos reflectores y en los siguientes años se vieron en diversos clásicos.

El último escenario en el que se vieron antes de ser compañeros fue en Rusia 2018, cuando Costa Rica se midió a Brasil en fase de grupos y el sudamericano mostró sus respeto al tico al final del duelo.

Mientras que ambos jugadores sigan rindiendo en la cancha, qué importan los bailes en tik tok, los malabares o las salidas juntos si más parece que Keylor logró lo que parecía imposible, mantener a Neymar en París feliz y tranquilo.