Ni Saprissa ni los árbitros, el Herediano pudo contra todos

En el Herediano tienen un dicho que dice “con todo y contra todos”, así salió este miércoles el cuadro florense al partido de ida de las semifinales ante el Saprissa jugado en el Estadio Nacional.

Con todo se vio en la actitud y las ganas y contra todos porque además de frenar a los morados, se debió enfrentar a las malas decisiones arbitrales.

A pesar de todo, nada de eso alcanzó para frenar al Team y encaminar muchísimo su eliminatoria al golear 3-0 al Saprissa, dirían que así sabe el doble

Por el lado morado, el Monstruo no hallaba por donde encontrarse, el buen esquema rojiamarillo lo tenía mal, podrido, le entraban por todo lado y generaba muchísimas dudas en defensas.

Fue un muy mal momento para que la zaga tibaseña volviera a hacer aguas, dejara las dudas de tantas otras veces y diera facilidades que el Team buscaba aprovechar.

La dupla de Quirós y Josué Mejía, que anuló dos goles a los florenses y no pitaron un penal clarísimo de Mariano Torres sobre Gerson Torres en el primer tiempo, estaba haciendo más en zaga por los morados que Aubrey David y Alexander Robinson, evitando los goles que no podían frenar los centrales del Monstruo.

Lamentablemente para los rojiamarillos, las decisiones arbitrales evitaron que aquello fuera una noche de pesadilla, sin los fallos la mejenga hubiera terminado 6-0, si el Team mete el penal no pitado.

La primera bronca llegó rápido, apenas a los 9 minutos cuando un remate de Leandrinho dentro del área pegó en Yeltsin Tejeda, quien estaba en línea con Luis José Hernández, balón que acabó al fondo de los mecates.

Ahí apareció por primera vez Mejía alzando la bandera y robándole al Team el primer grito de gol, pero la noche apenas estaba empezando.

A los 26, a la torta se le bajó un poco el tono con el gol de Orlando Galo, quien pescó un remate dentro del área luego de un pésimo rechazo de Aubrey David de cabeza.

La pecosa le quedó cerca del punto de penal y remató de derecha, la pecosa la desvió Johan Venegas y se fue para dentro, en la celebración Galo se fue besando el escudo.

Cinco minutos después el Team llegó al segundo ante un rival que no daba pie en bola, Gerson Torres le trazó un gran servicio por la banda derecha a Nextalí Rodríguez quien de derecha la clavó al segundo palo, pero Mejía les dijo de nuevo un, ¡suave ahí!

Sin explicación lógica, el línea anuló una jugada que estaba perfectamente habilitada, lo que hacía respirar un poco al Monstruo y le empezaba a llenar la cachimba a los florenses.

Si Johan Venegas hubiera anotado a los 36 minutos, el fallo anterior hubiera dado aún más cólera, pero para fortuna florense Bryan Segura le hizo un tapadón al Cachetón sacando el pie derecho ante el remate del goleador morado en el corazón del área.

Como nadie en Saprissa reaccionaba, tuvo que aparecer otra vez Allen Quirós para salvarles la tanda, esta vez haciéndose el loco con un penal que Mariano Torres cometió sobre Gerson Torres, a quien le tiró todo el brazo, provocando que se cayera.

Cuando terminó el primer tiempo, Jafet Soto se fue para la media cancha y no se pudo aguantar darle un mensajito a los réferis a quienes les recriminó el robo de dos goles y un penal para su equipo, por lo que lo expulsaron de una.

Golpes letales. Para el segundo tiempo, el suplicio morado siguió, pero ya Quirós no pudo hacer más y debió dejar al campeón nacional a su suerte, a expensas del inspirado rival.

Un balón al palo que pegó Jimmy Marín pudo ser el anhelado gol de visitante que es el criterio de diferencia en caso de empate en la serie, pero la chobocala pegó en el vértice del lado izquierdo del marco florense.

El Team apenas se estaba bajando del susto de aquel derechazo cuando consiguió el segundo pepino, un tiro libre de Jefferson Brenes que clavó en el primer palo del arco morado, el cual por más que se estiró Aarón Cruz no pudo llegarle.

Brenes cobró en corto, a Gerson Torres y con la pecosa un toque más adelante pegó el remate preciso a los 49 minutos.

La cachetada final cayó al 65, un gol en el que Torres mostró todo su talento, aprovechó la pésima marca morada y sacando un par de rivales en el área metió un zurdazo al palo largo, otro pepino.

Ni el Monstruo, ni los árbitros pudieron con un gran Herediano que buscará en Tibás cerrar una serie que tiene con la mesa servida.