Puntarenas FC perdonó en el primer juego de la final del torneo de Apertura de la Liga de Ascenso contra Barrio México, cuya mejenga finalizó 0-0.

Los porteños dejaron ir la victoria sobre todo en la primera parte, cuando tuvieron para meterla en más de una ocasión, pero los jugadores dirigidos por Horacio Esquivel pecaron en la definición y les faltó una brújula para encontrar la red rival.

El encuentro se llevó a cabo en el estadio Lito Pérez, bajo un calor impresionante (la temperatura rondaba los 30 grados) y con una buena cantidad de aficionados que se hicieron sentir en la Olla Mágica.

Hasta tirar para arriba

Puntarenas FC fue superior al Barrio México; sin embargo, los josefinos tuvieron algunos chispazos durante el encuentro.

Una de las opciones más claras del equipo dirigido por Gilberto Martínez se dio al minuto 20, cuando Jefry Montenegro remató a marco, pero le dio mal y la pecosa se fue por el costado izquierdo del arquero Guido Jiménez.

Un minuto después, la mejenga se suspendió porque al arquero mexicanista, Bryan Morales le estaban lanzando objetos desde la grada.

Al 31 el Puerto tuvo su chance más clara, cuando el árbitro Ariel Cordero se inventó un penal, el delantero Víctor Pérez cayó en el área supuestamente empujado por el defensor Edder Monguío, pero nada que ver.

Tres minutos después, el exjugador de Pérez Zeledón, Asdrúbal Gibbons cobró la pena máxima con la pierna derecha y la voló, la bola se fue por encima del marco de Morales. Justicia divina dirán los del Barrio.

Otra acción clarita para el Puerto se dio al 38, cuando Krisler Villalobos entró al área y entre rebotes y amagues se llevó a cinco defensores, disparó a marco y Morales se jaló un tapadón con el pie derecho, el rebote le quedó a Villalobos quien contraremató y la pegó en el horizontal.

Desgastados

El calor pareciera que golpeó más a los porteños porque entraron bajoneados al complemento y eso le permitió a Barrio México controlar la mejenga.

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El susto del partido se dio en un choque entre el josefino Jameson Scott y el porteño Steven Williams que dejó inmóvil en el suelo al exjugador de Limón, por dicha al rato se levantó y siguió jugando, mientras que a Scott lo pintaron de amarillo por la acción.

Lo mejor quedó para el juego de vuelta, que se jugará el próximo sábado 18 de diciembre, a las 7 p.m. en el estadio Cuty Monge, casa de los del Barrio.