Javon East llegó con la varita mágica al Morera Soto y fue el encargado de que el Monstruo se fuera con los tres puntos en la bolsa tras el duelo ante el archirrival. El jamaiquino gritó con todo el gol en su debut en clásicos.

Los morados no solo se llevaron la victoria sino el dinero de media taquilla y hasta un par de tenis, de eso ya hablaremos más adelante.

El caribeño recibió un buen pase filtrado de David Guzmán, a los 66 minutos, y dejó sin posibilidad a Leo Moreira con un cañonazo espectacular que hizo festejar a Saprissa, una vez más, ante el León.

El clásico tenía sus cosas. Era un partido de poder a poder, no solo por ser los dos más enconados rivales del país y los de más afición, sino porque llegaban en igualdad de condiciones al Alejandro Morera Soto, con 20 unidades, y el premio gordo para el ganador era quedar como único escolta del superlíder, Herediano.

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Entonces saltó a escena un hombre que no estaba en la lista de posibles protagonistas del partido, para robarse el show un ratico, el técnico de Alajuelense, Fabián Coito, expulsado por reclamar la expulsión de su pupilo Johan Venegas casi al cierre de la primera parte. El uruguayo duró cuatro minutos en salir del campo.

Coito conversó con el árbitro Ricardo Montero, con el línea, con Ricardo Blanco, con Jeaustin Campos, con la seguridad y hasta con los aficionados mientras salía de la gramilla del Morera Soto.

El hombre reclamó la segunda amarilla que le sacaron al Cachetón, tras reclamar por una supuesta falta de Blanco sin disputa del balón. La falta, en tele, se ve clara, pero la vista de todos estaba en el balón, en otro sector.

Pero el clásico tenía otras cosas, como el deseo claro de Kendall Waston de anotar en Alajuela, un estadio donde no ha podido hacerlo. El espigado defensor se fue al ataque en la bola quieta, pero estuvo bien marcado. Cuando le tocaba marcar, sí se imponía.

También estaba el detalle de los morados Luis Paradela, East, Pablo Arboine, Youstin Salas, Fidel Escobar, Álvaro Zamora y Kevin Chamorro, por lucirse en su primer duelo ante el archirrival. También el erizo Doryan Rodríguez quería demostrar que esos partidos no le quedan grande y luchó cada pelota e incomodó a la defensa tibaseña, asedió a los defensores en la salida y más de una vez obligó al despeje ante su acoso, y ni qué hablar del debutante rojinegro Erick Cabalceta, de buen nivel.

East les ganó a todos

Pero hablemos del partido, en el que nos encontramos a una Liga queriendo imponer sus condiciones, lavarse esa imagen de que está bajo el zapato morado, pero el Sapri es el Sapri y fue el equipo que tomó la iniciativa y el que se veía con ideas más claras a la hora de llegar al marco contrario. Eso sí, faltó profundidad en ambos equipos, pero no emoción, porque los jugadores se brindaron al máximo.

East fue el primero en asustar apenas a los dos minutos, con un remate cruzado que se llevó Leo. Luego, al seis, la Liga llegó con un centro desde la izquierda de Bryan Ruiz a Freddy Góndola, que el pana cabeceó, pero Kevin Chamorro detuvo.

Después, las condiciones de la cancha hicieron a Moreira soltar una bola que ya tenía controlada. Le quedó al jamaiquino y este se la dio a Paradela, quien definió como tenía que ser, pero que Erick Cabalceta evitó con su cuerpo que el balón se fuera a la red.

El primer tiempo terminó con el show de Coito.

Dominio visitante

Con el hombre de más, Saprissa encimó en el segundo tiempo.

David Guzman, de nota alta, lo intentó con remates de media distancia que no pasaron a más.

En los primeros minutos de la complementaria, el León se paró bien y disimuló la desventaja numérica, pero conforme pasaron los minutos el Monstruo se apoderó del juego totalmente.

Celso Borges, al 51′, hizo una barrida que vale por un gol, al evitar que Javon anotara cuando iba de cara al marco solito.

Y surgió entonces la figura de Leo Moreira, que le paró un cabezazo al cubano y un remate en corto a East, el dominio ya era intenso.

Y fue al 67′ que East recibió un gran balón de David Guzmán para finalmente poder vencer a Osito.

Como detalle curioso, durante la celebración de los morados, un aficionado lanzó un par de tenis a la cancha. Algunos recordaron aquel taco que Jonathan McDonald le lanzó a Andrés Imperiale en la final del Torneo de Invierno 2015.

Marvin Angulo pudo meter el segundo pepino en una gran jugada de Paradela, pero Moreira volvió a salvar al León.

Al final, quedó la sensación que el Monstruo pudo meter más goles y que Leo fue la figura manuda.

Cabe destacar que con la victoria, Saprissa llegó a 133 triunfos contra los 103 del León, o sea, una diferencia de 30 juegos, la mayor diferencia en los 73 años de rivalidad entre ambos equipos, según datos del periodista Christian Sandoval.

Además, como si eso fuera poco, la “S” se llevó la mitad de la taquilla por un acuerdo que hubo entre las instituciones previo al sorteo del calendario.