EscucharLuciano Spalletti, entrenador del Inter de Milán, tendrá que ver desde las gradas el partido del martes contra la Fiorentina, ya que recibió un partido de sanción porque gritó con demasiado entusiasmo un gol.
El pasado sábado, después de que el croata Marcelo Brozovic anotara el 1-0 contra la Sampdoria al minuto 94, el técnico celebró el tanto gritando frente a una cámara de televisión, lo que le valió para ser expulsado.
Las instancias del fútbol italiano han juzgado esa celebración como una “actitud controvertida con respecto al cuarto árbitro”, es decir, según ellos se le fue la mano celebrando y por eso le impusieron un partido de sanción.
Como era de esperarse, el Inter ya presentó un recurso de apelación, que deberá resolverse el martes al mediodía.
“Siento lo que pasó, pero no quiero añadir nada”, declaró este lunes el técnico en la conferencia de prensa previa al partido con la Fiorentina, precisando que en caso de ser sancionado se podría originar “un precedente difícil”.
“Me giré a la cámara para gritar ‘gol’ y el cuarto árbitro me dijo que lo había hecho con demasiada fuerza”, había explicado Spalletti el sábado.
“Era un gol tan importante, fue como una liberación y ellos (los árbitros) lo interpretaron como una reacción demasiado emotiva. No hice nada malo”, añadió el técnico.
