Cuando Cartaginés ganó el tercer título de su historia el 12 de enero de 1941, correspondiente al campeonato de 1940, Saprissa ni siquiera había debutado en primera división, Herediano tenía diez títulos ganados y Alajuelense apenas 2.

El segundo equipo en importancia, o al menos el que le seguía a Herediano en títulos obtenidos era La Libertad, con cuatro, ya desaparecido.

Han pasado 82 años, 36 títulos morados, 28 de la Liga, 19 del Team para que los blanquiazules lograran tener su cuarta estrella en sus vitrinas.

Ese tercer título se dio en el marco de la II Guerra Mundial y han pasado tantas cosas a nivel mundial desde esa vez que La Teja le hará un repaso.

Ese mismo año, en el 41, Costa Rica le declararía la guerra a Alemania y a Japón y en esos años el futbol se jugaba dentro de un contexto de guerra mundial.

Ballet sin fiesta

Tuvieron que pasar 27 años desde aquel título para que los brumosos estuvieran cerca de volver a ganar un título. Se dio en 1968, cuando quedó de segundo lugar en un torneo donde el que sumaba más puntos era el campeón. Saprissa logró 56 puntos y los brumosos 45.

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Ese equipo era el famoso ballet azul, que bailaba a sus oponentes con un futbol elegante, de lujo. Los entendidos dicen que es de lo mejor que se ha visto en Costa Rica, pero no pudieron ganar un título. Ese maravilloso equipo duró del 64 al 68.

El hombre llegó a la luna en 1969 y ya en Costa Rica se empezaba a hablar de una maldición que perseguía a los brumosos. Se decía que los jugadores por entrar a caballo y borrachos a la basílica de los Ángeles en aquella celebración del 41, no ganarían más títulos. Eso dio comienzo a una de las leyendas urbanas y folclóricas más lindas de Costa Rica. Pero nada de eso era cierto.

La maldición

El cuento de la maldición tomó fuerza en los setentas, cuando los brumosos seguían siendo un equipo muy fuerte, pero los campeonatos pasaban de lejos, bueno de cerquita. Repasemos

Cartaginés perdió los títulos del 73, 75 y 77 con Saprissa y el del 79 con Herediano.

Ya el mundo había sido testigo de toda la época hippie, un movimiento que empezó como una protesta a la guerra de Estados Unidos contra Vietnam, y poco a poco la era digital se fue incorporando en el mundo y las computadoras se asomaban como herramientas muy útiles.

En el 73, Cartaginés queda segundo en la segunda vuelta (clasificaban a una cuadrangular final los dos primeros de cada vuelta) pero la cuadrangular final la ganó Saprissa. No hubo gran final.

En el 75, los brumosos ganan la fase regular y en la cuadrangular final quedó empatado en puntos con Saprissa, pero los morados tenían mejor gol diferencia.

En el 77, cuando ganaron la fase regular y los morados la pentagonal, Marco Rojas, portero de Saprissa tuvo una actuación formidable en la final y mantuvo un milagroso 0 a 0 en Cartago.

Con todo eso, para el partido de vuelta los brumosos sentían que estaban para campeones y hasta pintaron el Ricardo Saprissa de azul y blanco y de grafitis que decían “CSC campeón”, pero Rodolfo ‘Boby’ Alvarez, portero brumoso, tuvo un día para el olvido, se comió dos goles y los morados ganaron 2 a 0.

La volvieron a pulsear dos temporadas después, en el 79 cuando ganaron la pentagonal y disputaron la final con el Herediano. Empataron a dos en el Fello Meza y el Team ganó la vuelta 3 a 0. A partir de allí, el Herediano empieza a tomar forma de la bestia negra brumosa.

Crisis económica y brumosa

Es por esos años cuando se viene la recesión mundial del petróleo y las grandes filas para comprar comida son pan de todos los días, bajo el gobierno de un presidente cartaginés, Rodrigo Carazo.

El golpe en la economía lo siente el club, que no invierte y el equipo desciende en 1981, casi en sintonía con el empobrecimiento que se vivía en el país.

Los brumosos regresan a primera en el 83 y cinco años después volvieron a una final, la de la temporada 87-88, otra vez contra Herediano.

Los florenses tomaron ventaja 2-1 en el partido de ida jugado en el Nacional y para la vuelta en el Fello Meza se desató la polémica arbitral. A Cartaginés le anularon un gol de cabeza de José Chan de forma inexplicable, al final el partido quedó 1-1 y el Team se coronó campeón.

Mientras tanto cayó el muro de Berlín y acabó la Guerra Fría, pero Cartago seguía estancado en sus tres títulos y la leyenda urbana de la maldición y el muñeco enterrado, eran verdades culturales, de esas que no son ciertas, pero que todo el mundo las cree.

La ilusión regresó en la final del 92-93 y de nuevo ante los florenses y otra vez con polémica arbitral.

Herediano ganó en la ida 2-0, con un penal que pitó Rodrigo Badilla, la bronca fue que la falta se dio fuera del área. En la vuelta se armó un broncón en el Fello y el partido se terminó de jugar en cancha neutral (estadio Nacional) y quedó 0-0, otra vez Herediano campeón.

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En el 95-96, con un equipazo, ganaron la segunda fase al eliminar a la Liga, pero cayeron con los rojinegros en la gran final, 1 a 3 en el Fello Meza y un empate a uno en el Morera Soto.

Eso sí, los brumosos ganaron el título de la Concacaf en el 94, una de las páginas más brillantes de la institución en su historia y que representa una especie de oasis en esa sufrido trayecto hacia la cuarta copa.

Llegó el nuevo siglo y nada de título para Cartaginés, tuvieron que pasar 13 años del siglo XXI para llegar a una nueva final.

Fue ante Herediano, luego de ganar la segunda fase, donde elimina a Saprissa y tras ganar 3 a 1, el primer juego, cayeron en el segundo por el mismo marcador. La tanda de penales favoreció al Team y la frustración y la maldición parecían inseparables de los brumosos.

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Eso fue hace nueve años cuando las redes sociales empezaban a tomar fuerza y es hasta en el 2022, 101 después del primer campeonato que se organizó en Costa Rica, Cartaginés logró su ansiado título cuatro.