Video: Fabián Coito firmó una dulce vengaza en Honduras al dar un golpe de autoridad con Alajuelense

Mientras que Fabián Coito fue técnico de la selección de Honduras, en dos años no pudo ganar un partido en territorio catracho, irónicamente en su regreso a ese país, rompió esa racha, ahora dirigiendo a Alajuelense y llegó a darse la fiesta.

La venganza de Coito fue dulce, si el año pasado lo sacaron por la puerta de atrás de tierras catrachas, esta vez se fue de allí con una sonrisa de oreja a oreja, dejando callados a muchos de sus críticos, tanto allá como en Tiquicia.

¿Por qué en Tiquicia? A los rojinegros con el charrúa le han tachado de ser un equipo que no luce con mucho brillo, pero si uno se va a los hechos es un equipo que saca los resultados y que tiene pegada, que monta contras con gol, como lo hizo en San Pedro Sula.

Los manudos se encontraron el mejor escenario posible en el inicio de las eliminatorias que les toca jugar, ganar con categoría de visita a un equipo que venía de echarse al Cartaginés y al Herediano y con esto llegan inspirados al clásico.

Tampoco vamos a decir que los manudos lucharon por el honor de Costa Rica, está claro que pelearon por ellos primero, pero por algo será que los rojinegros no pierden una mejenga en este torneo desde el 2017.

¿Quién sabe si Coito se la querrá jugar en la vuelta de las semis de Concacaf pensando en la vuelta de las semis del torneo nacional? Pero lo cierto es que este resultado le da chance para pensar en algo más.

Gran ventaja. Alajuelense consiguió su primer objetivo en Honduras al abrir el marcador con gol de Johan Venegas, aprovechando un enredo de la defensa catracha en varias fases.

Freddy Góndola tomó un gran pase de profundidad de Celso Borges, el defensor hondureño Getsel Montes se barrió y le pegó la pecosa en los pies al canalero, al meta Luis “Buba” López no le dio chance de llegar antes que Johan Venegas tomara la pecosa.

El Cachetón remató casi de una, Góndola la rozó con un pie y a otro zaguero catracho, Kevin Álvarez, le pasó la bola por las horquetas para abrir el marcador y sacar oro en un torneo en que los goles de visita en caso de empate en la serie, valen doble.

Unos dos minutos después del gol, el árbitro mexicano César Ramos amagó con anular el gol, se fue a hablar con uno de sus líneas por una supuesta posición prohibida, pero al final lo dejaron todo igual.

La duda se generó porque Góndola roza la bola y estaba metido, dado que solo había un jugador entre el marco y la bola, para los narradores de ESPN, donde se transmitió el partido, se debió anular, pero el réferi no pensó lo mismo.

Luego de abrir el marcador, los manudos tuvieron más opciones para adelantarse, pero la falta de calma o dejarse la bola un segundo de más les cobró no terminar el primer tiempo con más ventaja, pues generaron opciones para lograrlo.

Los locales tomaban más la bola, pero sin la claridad o el peligro suficiente para inquietar a Leonel Moreira. La que pudieron haber echado el paraguayo Pedro Báez la regaló con un remate de cabeza muy ligero a las manos de Osito.

Para el segundo tiempo el guion no cambió mucho, el España seguía con el balón pero los erizos volvieron a hacer gala de su efectividad en una jugada a la que hay que sumarle la asistencia a Leonel Moreira.

El meta sacó rápido, vio al Cachetón solo, Johan bajó la pecosa casi en tres cuartos de cancha, se quitó a Franklin Flores y definió al segundo palo al 57.

Tres minutos después la Liga liquidó con una jugada entre Johan y Celso Borges, que sigue demostrando porque es el jugador por el que gira el juego erizo y del que los catrachos fracasaron en tenerlo a mecate corto.

Celso la tomó en la media, se la sirvió a Venegas y siguió corriendo y cuando el 8 vio que su compañero iba solo se la volvió a poner y ahí el volante demostró porque es leyenda en el fútbol costarricense.

Cuando Borges vio salido al Buba, tocó la chocobola para bañar al meta en un jugadón que volvió locos a los manudos y que los pone con pie y medio en la final del torneo.

Los manudos mostraron que de piernas y corazón están fuertes y que están dispuestos a pelearlo todo aunque muchos aún no les den ese crédito.