En esos 1800 metros cuadrados de pura diversión, se podrá encontrar modelos armables, juegos de mesa y cartas intercambiables, con figuras coleccionables que incluso, podrían llegar a costar casi dos millones de colones
Antes de llegar a ser profesional, el defensor manudo veía las aventuras de Oliver, Benji, Tom y los demás en el Niupi, con quienes compartía el mismo sueño, ser una gran estrella del fútbol.
Nostalgia pura vivirán los fiebres del animé con el estreno de la cinta.