Se trata del crucifijo de la iglesia romana de San Marcello, y que en 1522 fue llevada en procesión por los barrios de Roma para invocar el fin de la peste que la asolaba
Se trata del crucifijo de la iglesia romana de San Marcello, y que en 1522 fue llevada en procesión por los barrios de Roma para invocar el fin de la peste que la asolaba