EscucharEl famoso toro el Angelito demostró que su nombre no tiene ninguna relación con su furia y se despidió de los redondeles el pasado 28 de diciembre mandando al montardor Joshua Mendoza al hospital con una quebradura en la pierna derecha.
El rudo encuentro ocurrió en las corridas de Zapote, en horas de la noche, ya que los organizadores planearon una monta de exhibición para despedir como los grandes a El Angelito, ya que el torito está viejito y sus dueños desean que se la tire rico en los potreros.
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El valiente que se ofreció a montarlo fue Joshua Mendoza, quien es parte del grupo de montadores Los Nicoyanos desde hace 4 años.
Mendoza llevaba cerca de ochos años realizando montas, por lo que sabía muy bien que se enfrentaría a un toro muy rudo, a pesar de que nunca había montado a el Angelito.
El Angelito es conocido en el mundo taurino como el toro que vuela, porque pega unos brincos en los que queda suspendido en el aire por varios segundos. El cachudo demostró que es viejo, pero no pendejo, porque se jaló una tremenda jugada y botó en dos toques a Mendoza.
Cuando el vecino de Filadelfia, Guanacaste, estaba en los lomos de la bestia se le soltó la espuela de la pierna derecha, así que el Angelito lo hizo como un muñeco de trapo mientras la pierna izquierda seguía bien pegada.
Los movimientos del Angelito eran como latigazos debido a su potencia, por lo que cuando el montador guanacasteco cayó en la arena supo que algo andaba mal.
Los improvisados asistieron de inmediato a Mendoza y lo llevaron a la Cruz Roja, de donde lo mandaron con colilla para el hospital San Juan de Dios.
Royner Villalobos, uno de los dueños de Los Nicoyanos, comentó que a Joshua le diagnosticaron una quebradura de fémur, por lo que lo trasladaría al Hospital del Trauma para operarlo.
No es la primera vez que Joshua se lleva semejante susto. El 25 de diciembre del 2015, en el redondel de toros de Filadelfia, una jugada no salió bien y el cachudo le quebró la pierna izquierda, por lo que estuvo un año fuera de las montas.
"Como Joshua es muy pequeño se le tienen que buscar toros no tan grandes, por eso se le dio el Angelito, que ya está viejo y como era una monta de exhibición pensamos en él. Él (Joshua) maneja un estilo libre de las dos manos que lo hace un montador muy particular", expresó Villalobos.
Este año había retomado las jugadas en marzo pasado, pero ahora después del sustote que le pegó el cachudo tendrá que volver a tomarse otro "descanso" obligatorio.
Afortunadamente, el montador tiene varias peluquerías en Guanacaste para poder subsistir durante estos meses de inactividad.
