La quinta gala de Dancing with the stars le sacó las lágrimas a más de uno en la pista y a más de un televidente lo puso a reflexionar.

La historia del año memorable que contaron Bryan Ganoza y Kimberly Loaiza fueron de las más sorprendentes, porque trataron el tema de la anorexia, el bullying y cuando se le da más importancia al dinero que a la familia.

Este último caso fue el que expuso el “cabro más macabro”, quien contó que este 2020 la vida se encargó de darle una bofetada para que reaccionara y comprendiera que primero están sus hijos que hacer dinero en Estados Unidos.

El nacimiento prematuro de su hijo Bastian, a quien casi muere y lo tuvieron que operar de emergencia de peritonitis, fue lo que lo marcó y lo hizo tomar la decisión de regresar a Costa Rica y vivir de nuevo junto a su pareja Youcenar Castro y su otra hija Collette.

Luego de su baile le llevaron a sus dos hijos y el cantante no pudo contener el llanto.

“Tuve que pasar por una situación difícil para poder entender, pero gracias a Dios aquí tengo a este gordito para cuidarlo mucho, para darles mucho amor y hacer a mis hijos personas de bien”, dijo el concursante.

Novios marcaron a Kimberly

La modelo y presentadora Kimberly Loaiza también sorprendió al público al contar que el año que la marcó para siempre fue el 2012, cuando sufrió anorexia.

“En ese año tuve una recaída en un trastorno alimenticio que tuve, que fue la anorexia. Durante mi infancia y la adolescencia sufrí mucho bullying, de parte de algunas de mis exparejas también recibí comentarios como, ‘ya estás pasadita verdad’, ‘le vas a tener que volver a poner porque te estás pasando de nuevo’ y fueron tantos los comentarios que yo recibía así de mis exparejas que, sin mentirles, yo duré casi unos siete años de mi vida vistiendo de negro todos los días”, contó la concursante.

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Kimberly mencionó que con los años logró ir superando poco a poco sus problemas de alimentación y que hoy es otra mujer, que se quiere y se acepta tal y como es.

Al igual que ellos todos sus demás compañeros fueron contando sus historias de vida, algunas tenían que ver con el nacimiento de sus hijos o con el fallecimiento de algún ser querido.