Cuidemos el ambiente de nuestro hogar

Estamos pasando por una situación muy complicada, que nos obliga a desacelerar toda nuestra vida y es por eso que tenemos que dejar de salir, de ver amigos. Además, no tenemos que exponernos, modificar hábitos de trabajo y suspender muchas actividades.

En fin, todos estos cambios nos llevan a estar más tiempo en el hogar, dedicarnos más a la familia.

En estos días surgió una noticia, una preocupación, sobre la posibilidad de un incremento en las estructuras de violencia intrafamiliar, precisamente, por estar todas las familias en casa.

Hoy nuestro reto es estar más tiempo en casa, con la pareja, los hijos, los hermanos y los padres, ¿será tan complejo? Creo que no, lo que necesitamos es estar serenos y tranquilos.

Es clave es estar en una casa que nos permita sentirnos acompañados, en medio de la crisis. Todos sabemos que en toda familia hay momentos de tensión, desacuerdos y diferencias de criterio, pues todos tenemos diferentes formas de ser, pero si le damos paso a la intolerancia, esto podría causar que una molestia se transforme en una discusión irracional.

- Hagamos uso del silencio, que nos permita canalizar los momentos difíciles, para no maltratar a los demás por un acto de impulsividad.

- Evitemos el consumo del alcohol, respetemos el ritmo de lo demás, revisemos si somos personas intransigentes o complicadas y seamos pacientes y prudentes.

Estamos en una crisis mundial, donde nos hemos dado cuenta de nuestra fragilidad y este podría ser un buen momento para sanar aquellas conductas y hábitos que nos han convertido en una persona explosiva e hiriente.

Hoy nos toca pasar más tiempo juntos y no debería preocuparnos asumir este proceso.

Es una oportunidad para compartir, para reírnos, hacer tonterías e inventar juegos, no para tener miedo de estar todos bajo el mismo techo.

Que la cuarentena se convierta en una experiencia constructiva y sana depende de cada uno.